Joaquín Rodríguez (Katusha) guarda en su palmarés una etapa en Orio de la edición de 2010, otra en Zumarraga de 2011 y ayer la de Ibardin. Esta parece ser la edición del «no hay 2 sin 3». Si el miércoles Samuel Sánchez conquistaba la Subida a Arrate por tercera vez consecutiva, ayer era el catalán el que se apuntaba su tercera etapa en la Euskal Herriko Itzulia. «Se me está dando de maravilla, tres años ganando y este, además, de líder. Estoy muy contento».

Así que afrontará con ganas la defensa del jersey amarillo en la decisiva contrarreloj de Oñati con la que mañana concluirá la prueba. «Los objetivos eran ganar una etapa y hacer un buen puesto en la general, y seguiremos trabajando. La crono es bastante técnica y me hace ilusión», aseguró Purito.

Acerca de su victoria de ayer, en una jornada con lluvia y bajas temperaturas, sobre todo al principio, el catalán comentó que «no conocía» la llegada a Ibardin, aunque por las referencias que le habían dado sus compañeros de pelotón Patxi Vila y Juanma Garate sabía que le «venía muy bien».

«El equipo se portó de maravilla y pensaba que podía ganar, pero nos encontramos con un Samuel que parece que tenga una casa en Arrate. Hoy -por ayer- también lo han hecho bien y he podido rematarlo».

Samuel Sánchez (Euskaltel), que perdió el liderato, habló de sus impresiones. «La etapa le venía muy bien a Joaquín, en este tipo de llegadas es imbatible. Es un corredor con mucha pegada, explosivo y cuando ataca y mete la directa es imposible cogerle. He hecho lo que he podido. Pero antes he hecho un sobreesfuerzo y quizás lo he pagado».

Sobre sus opciones al triunfo final, el campeón olímpico señaló que está «tranquilo» y que, de momento, prefiere pensar exclusivamente en la etapa dehoy antes de afrontar la crono final de Oñati, en la que se va a decidir la carrera. «Hasta ahora vamos bien y lo que tenga que venir, vendrá. Hay que ir día a día. Hoy -por ayer- se han hecho más diferencias que en Arrate, pero vamos mejor que el año pasado, con una etapa, el amarillo y bien colocados en la general», dijo. Al líder del Euskaltel la etapa con final en Ibardin no le pareció tan vistosa por culpa del tiempo. No obstante, ni la lluvia, ni la niebla mermaron la gran afluencia de aficionados en las cunetas. «De nuevo, 'chapeau' por el público. Que una vuelta como esta haya estado a punto de no celebrarse es una pena porque se ha visto que la gente responde. Estos eventos no pueden desaparecer», recalcó el asturiano del Euskaltel.

Patxi Vila (Utelsilnord). El navarro pasó ayer por su casa y esas cosas no suceden todos los días. El beratarra, que reside en Hondarribia, conocía como nadie el trazado de la cuarta etapa teniendo en cuenta que es su zona habitual de entrenamiento. «Ha sido una jornada especial. Podía haber bajado la cuesta con los ojos cerrados. Además he pasado por mi pueblo solo, aunque me han vuelto a coger».