El alcalde de Gasteiz, Javier Maroto, y la ministra española de Fomento, Ana Pastor, aprobaron ayer el estudio informativo previo al proyecto constructivo sobre el que versará el soterramiento del ferrocarril a su paso por la capital alavesa. Una obra relegada al olvido en diferentes ocasiones, cuyo coste rondará los 500 millones de euros.

En una rueda de prensa ofrecida en la casa consistorial, posterior a la primera reunión del Consejo de la Sociedad del Soterramiento, Pastor explicó que, una vez se haya redactado el proyecto constructivo, en el que se detallarán los pormenores de los dos túneles previstos, se procederá a licitar las obras de la primera fase.

Según avanzó el primer edil, dicha fase, que podría comenzar a ejecutarse el próximo año, servirá para conectar los ramales norte y sur del TAV a su paso por la periferia de la ciudad. Puntualizó que el citado enlace no irá soterrado y contará con un trayecto provisional para poder utilizar la actual estación de la calle Dato.

A este respecto, Maroto aclaró que las obras de la segunda fase del soterramiento, donde se incluye la ejecución de los túneles de siete kilómetros de longitud y la construcción de la nueva estación -situada bajo el colegio Pío Baroja- no comenzarán a ejecutarse hasta 2015, una vez haya finalizado en enlace en la periferia.

De momento, la fecha lanzada por Maroto no deja de ser referencial, ya que la misma no fue confirmada por la ministra, que llegó a calificar de «perfecta» la futura ubicación de la estación, para más tarde reconocer que no ha visitado el lugar escogido para albergar la nueva infraestructura.

En cuanto a la reacción de los grupos que componen la oposición, ayer el portavoz de Bildu en el Ayuntamiento de Gasteiz, Kike Fernández de Pinedo, criticó que el primer edil «sigue sin despejar la incógnita fundamental de este proyecto, que no es otra que de dónde va a sacar el dinero para pagar la parte correspondiente al Consistorio».

Visita a las obras

Por otro lado, Ana Pastor visitó las obras del TAV a su paso por la localidad vizcaina de Zornotza, donde anunció que el Gobierno español va a mantener el ritmo de ejecución de las obras de la «Y vasca» para poder finalizarla «lo antes posible». Sin embargo, al igual que hizo en Gasteiz, la dirigente del PP, que calificó de «prioritaria» esta obra a su paso por Euskal Herria, evitó poner una fecha concreta para su ejecución.