Por ello, hicieron un desfile desde el Boulevard hasta el Kursaal. La principal diferencia de los alardes que se hacen en Irun y Hondarribia era la hora, ya que ayer se celebró por la tarde, con un sol espléndido. Pero también fue diferente el ambiente, ya que los participantes no tuvieron que aguantar ni insultos, ni escupitajos ni la presencia de plásticos negros. Solo escucharon aplausos. Paradójicamente, tuvieron que viajar de Irun y Hondarribia hasta Donostia para «jugar en casa» .

«Parece la arrancada de verdad, con tanto fotógrafo», comentaba una joven, seguramente llegada de Irun, junto al kiosco del Boulevard.

De este modo, desfilaron marcialmente desde el Boulevard para cruzar el puente de la Zurriola para llegar al edificio del Kursaal. Allí, siempre sin dejar de tocar, hicieron un pasillo de honor a impulsoras del alarde igualitario a las puertas del palacio de congresos.

Ya estaba todo preparado para entrar al Kursaal y que el Alarde Igualitario de Irun y la Compañía Jaizkibel de Hondarribia recibieran el galardón de Emakunde a la Igualdad, en el marco de Emakunde Gaua, en la que se rindió homenajes a las asociaciones de mujeres de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. «Con este galardón, Emakunde pretende premiar su apuesta por el reconocimiento del derecho de las mujeres a participar en igualdad en las fiestas y celebraciones populares, sin olvidar las dificultades a las que se han enfrentado desde que se iniciara su lucha en 1996», destacó el organismo dependiente del Gobierno de Lakua.

Una de cal y una de arena

Una de esas dificultades a las que se tienen que enfrentar los defensores de los alardes igualitarios en esas dos localidades de Bidasoaldea estuvo presente también ayer.

El mismo día en el que un organismo dependiente de Lakua otorgó un galardón se conoció que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) proclamó que la decisión del Departamento de Interior, también de Lakua, de modificar el itinerario de la Compañía Jaizkibel -para beneficiar a los organizadores del alarde segregador de Hondarribia- no tenía justificación. Un mismo gobierno premia por un lado a quienes el mismo ejecutivo castiga.

El argumento del departamento que dirige Ares fue que se procedió a cambiar el itinerario por motivos de seguridad, pero el TSJPV, siete meses después, destaca que no había motivos para ello, teniendo en cuenta la evolución que el Alarde ha tenido en los últimos años. Junto a ello, recuerda que el recorrido del Alarde es simbólico. Debido a la decisión de Interior, se registró una sentada antes del Alarde igualitario de Hondarribia del año pasado y sus promotores lamentaron que se retrocedieron cinco años en el camino de la igualdad.

«Lo que ha sucedido es como cuando todos los partidos votan a favor de una Ley de Igualdad, pero luego muchos de esos partidos permiten que exista una discriminación de la mujer en el Alarde», señaló a GARA Elisabet Olaskoaga, portavoz de la Compañía Jaizkibel de Hondarribia.

Olaskoaga subrayó la importancia de defender la participación de la mujer en las fiestas populares como parte de la lucha para erradicar roles. «¿Cómo se entiende eso de que no podamos participar en igualdad de condiciones en el Alarde. Nosotros respetamos la tradición, pero pensamos que hay elementos que hay que adecuar a los tiempos actuales. No puede ser que la participación de la mujer se limite a ser cantinera y que además se le exija ser virgen y soltera. Esos roles no se pueden mantener», explicó.

Alternatiba, por su parte, felicitó ayer a la Compañía Jaizkibel por la sentencia del TSJPV y, según destacó su portavoz, Ana Etxarte, «es lamentable ver cómo Emakunde premia un alarde público que Rodolfo Ares castiga». En este sentido, Etxarte calificó de «coincidencia e ironía» el hecho de que el premio de Emakunde se otorgue el mismo día en el que los tribunales desautorizan a Interior.

«Estos dos hechos dan muestra del escaso peso político que el Gobierno López confiere a las políticas de igualdad al permitir adoptar a Ares decisiones contrarias a las que promulga Emakunde», añadió Etxarte, que recordó que Lakua trató de quitar competencias a Emakunde.