El sindicato LAB denunció ayer en una concentración en Urnieta que en la construción del Tren de Alta Velocidad (TAV) se incumple «sistematicamente» el convenio de la Construcción, con las consiguientes consecuencias que ello acarrea en la salud de los trabajadores.

La central alerta de que las condiciones de trabajo, la precariedad, la temporalidad y la subcontratación son la causa de las enfermedades y accidentes de trabajo y recuerda que desde que comenzaron las obras del TAV son cinco los trabajadores fallecidos.

Para el sindicato se trata de obras «faraónicas» que han sido impuestas para «beneficiar a la élite» mientras «generan pobreza en los trabajadores y destruyen el medio ambiente». Además, critica que «las recetas para hacer más en el menor tiempo posible y con el menor coste posible», generan «prisas, horas extra y subcontratación». También denuncia la falta de coordinación y seguimiento de las obras por parte de las administraciones públicas y pide la paralización de las obras.

Incumplimiento en Tolosa

Precisamente hace dos semanas, ELA alertó del incumplimiento del convenio de la Construcción de Gipuzkoa en las obras del TAV en Tolosa. El sindicato denunció la situación y como consecuencia la UTE Tolosa-Hernialde de las obras del TAV restringió el contrato con la empresa Agotran. Además del incumplimiento del convenio, la central descubrió irregularidades en la gestión de la empresa.

Sobre el incumplimiento del convenio, ELA denunció que la empresa pagaba a los trabajadores «muy por debajo de lo establecido en el convenio de Gipuzkoa». Asimismo, alertó de que los empleados trabajaban «incumpliendo las normas de seguridad y circulación».

Agotran, empresa adjudicataria del segundo tramo de excavación y transporte de Tolosa-Hernialde tampoco tenía las tarjetas de transporte al día. Así, a instancias de ELA la Ertzaintza registró seis camiones de la empresa donde quedó probado que las tarjetas estaban caducadas y con cargas superiores a las permitidas.

En total, se contaron -según informó ELA- 19 infracciones y se estableció una multa de 65.000 euros para la madrileña Agotran y 22.000 euros para la UTE Tolosa-Hernialde.