Pakistán prueba sin objeciones un misil de alcance medio con capacidad nuclear
Pakistán probó ayer «con éxito» un misil de largo alcance con capacidad nuclear, una semana después de que India, su vecino y rival, hiciera lo propio, sin que EEUU y sus aliados hayan cuestionado estos lanzamientos como hicieron en el caso de Corea del Norte.
GARA | ISLAMABAD
Pakistán efectuó ayer un lanzamiento de prueba de un misil de alcance medio con capacidad nuclear, el Hatf IV/Shaheen-1A, anunció el Ejército paquistaní en un comunicado, tan solo una semana después de que su rival India llevara a cabo con éxito su primer lanzamiento de un misil intercontinental.
El alcance exacto del proyectil no ha sido especificado, pero expertos dijeron que podría dar en un blanco a 2.500 o 3.000 kilómetros de distancia.
El jueves pasado India, que ha librado tres guerras con Pakistán, única potencia nuclear del mundo musulmán, desde la independencia de ambos en 1947 tras la partición del Imperio Británico, anunció triunfalmente el primer lanzamiento de un misil de largo alcance con capacidad nuclear, un éxito tecnológico incuestionable. India y Pakistán poseen oficialmente armamento nuclear desde finales de los años 90 y desde entonces se enredan en una guerra de comunicados de prensa cada vez que se produce el lanzamiento de un misil.
El misil paquistaní, que cayó en el mar, es una versión mejorada del Shaheen-1, que puede recorrer una distancia de hasta 750 kilómetros, y tiene capacidad para llevar dos cabezas nucleares o convencionales, según la información facilitada por el Ejército. Pakistán realiza regularmente lanzamientos de prueba de sus misiles de corto y mediano alcance.
El director del Departamento de Armamento Estratégico, general Khalid Ahmed Kidwai, elogió el trabajo de los científicos en la exitosa prueba de ayer, asegurando que el misil alcanzó con precisión el blanco ubicado en el mar. Agregó que esta versión mejorada del misil Hatf permite a Pakistán fortalecer su capacidad de disuasión nuclear.
El arsenal paquistaní está dirigido como primer objetivo contra India, puesto que desde su territorio puede atacar todas las ciudades importantes de su vecino con misiles nucleares.
Disuadir a China
El lanzamiento el jueves por parte de India del misil Agni V, con un alcance de 5.000 kilómetros, fue aclamado con autosatisfacción y arrogancia patriótica por altos cargos del Estado indio. Su alcance le permite cubrir toda China, el otro gran rival de India en la región.
Los misiles de corto alcance Agni I y II (hasta 2.500 kilómetros) se desarrollaron sobre todo para hacer frente a la hipotética amenaza de Pakistán, mientras que los Agni III y IV (hasta 3.500 kilómetros) son percibidos como un medio de disuadir a China.
De hecho, la prueba del jueves inquietó a Beijing y a capitales occidentales, ya que ese misil podría llegar a cualquier punto de China y de Europa.
Pero no se han escuchado voces contra las pruebas realizadas por India o Pakistán, a diferencia de lo ocurrido cuando Corea del Norte anunció el lanzamiento, el pasado 13 de abril, de un cohete para poner en órbita un satélite, una iniciativa que resultó fallida y que EEUU y sus aliados consideraron que se trataba de una prueba de un misil balístico, por lo que adoptaron medidas contra Pyongyang. El Consejo de Seguridad de la ONU condenó ese lanzamiento al considerar que Corea del Norte violó las resoluciones que le prohíben desarrollar y usar tecnología nuclear y balística.
Ayer, Pyongyang acusó a EEUU, promotor de la condena, de utilizar un «doble rasero» al rechazar sus pruebas y apoyar los lanzamientos de misiles de otros países.