Barcina duda entre más impuestos, más recortes o más de ambas cosas
El Gobierno navarro mantiene el mutismo sobre cómo afrontará el recorte de 53,9 millones de euros que anunció el miércoles. El pronóstico de una recesión importante para 2012, estimada en el 1,2% del PIB, ha reventado sus cuentas y ni siquiera la amnistía fiscal podría hacer que su déficit encaje con las demandas de Madrid. Barcina asegura que, mientras haya crisis, los recortes serán constantes.
Aritz INTXUSTA | IRUÑEA
La presidenta navarra no despejó ayer las incertidumbre que generó su equipo de Gobierno el miércoles al avanzar nuevos recortes en 15 días. A la entrada al Parlamento, Yolanda Barcina se detuvo a hacer declaraciones a la prensa, pero sin mojarse. «Solamente hay dos posibilidades: o se suben los impuestos o se hacen recortes, o podríamos decir que hay una tercera posibilidad, que es hacer las dos cosas a la vez», apuntó la presidenta.
UPN se ha comprometido a que, en dos semanas, se aclarará su plan para eliminar 53,9 millones del gasto público. Sin embargo, por lo que parece, ni siquiera la cifra está clara. El consejero de Economía, Álvaro Miranda, se adelantó en dar este dato, pero podría ser un recorte de prácticamente el doble. El Gobierno navarro ha echado cuentas y la amnistía fiscal podría reportarle 40 millones este año. Sin ella, el desfase ascendería a más de 90 millones. Y no está claro que el PSN vaya a ceder, a tenor de sus últimas declaraciones. De todas formas, Barcina no parece preocupada y sostiene que, en dos semanas, el plan estará ya consensuado con su socio.
La presidenta también intentó quitar hierro a la nueva batería de recortes. Trató de relativizarla al compararla con el plan de ajuste de setiembre pasado, cuando el tijeretazo fue de 300 millones y produjo un auténtico shock social, sobre todo para los ayuntamientos que vieron cómo la última asignación cuatrimestral se veía mermada brutalmente sin tener en cuenta sus compromisos de gasto. «Se pueden tomar medidas sin que cueste tanto ejecutarlas como el año pasado, cuando nada más tomar posesión en setiembre tuvimos un ajuste de 300 millones», dijo la presidenta.
Barcina obvió que el nuevo tijeretazo se suma a los anteriores, y que la política de austeridad ha colocado a Nafarroa en una senda de recesión que se agrava y profundiza. La Consejería de Economía se ha visto obligada a cambiar sus predicciones de un crecimiento del 1,9% del PIB a una reducción del 1,2%.
Recortes y más recortes
El secretismo en el que el Gobierno navarro mantiene sus recortes pareció romperse levemente ayer en la reunión que mantuvo Barcina con el sindicato de funcionarios Afapna. La presidenta acudió a cerrar su séptima asamblea, en la que se reeligió a Juan Carlos Laboreo como líder de la central. En su discurso, la presidenta navarra señaló que el adelgazamiento de las políticas públicas es la única receta que contempla su ejecutivo. «Reconozcamos que, mientras la economía no se dinamice, fluya el crédito a los proyectos viables, se generen empleos y los ingresos públicos aumenten, las medidas de control del gasto ahora adoptadas serán insuficientes», dijo.
Los funcionarios no estarán libres de esta espiral de destrucción del estado del bienestar hasta una eventual recuperación económica. Barcina no pudo ser más clara. Recordó que en sus compromisos ya adquiridos por su Gobierno está el de reducir el gasto de Función Pública en 25 millones de euros. Por el momento, ha tomado pocas decisiones encaminadas en esa dirección y, ahora, al Gobierno le han entrado las prisas. «Lo cierto es que estamos a punto de finalizar el primer cuatrimestre del año y no podemos esperar más tiempo si queremos que el objetivo de reducir esos 25 millones se alcance», confesó .
Mientras tanto, la contestación por los recortes en salud y educación sigue aumentando. Ayer LAB entregó más de 14.000 firmas en defensa de la salud pública. Por su parte, el vicerrector de economía de la Universidad Pública cargó contra el aumento de las tasas, que ve como una medida «inoportuna».
Jubilados y pensionistas presentaron ayer en Bilbo la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) con la que pretenden recoger medio millón de firmas en todo el Estado español al objeto de revocar la decisión del Gobierno del PP de mantener vigente el decreto que aprobó el Ejecutivo anterior del PSOE por el que se mantienen congeladas las pensiones. En el acto participaron representantes de la Federación Vasca de Asociaciones de Prejubilados y Pensionistas (FEVAAS) y de Nagusilan, Voluntariado Social de Mayores, que están impulsando esta iniciativa en la CAV coordinados desde el Estado por la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA) .
Los pensionistas animaron a toda la sociedad a participar en esta campaña que lleva por lema «Una firma contra la congelación» y denunciaron que la congelación les ha supuesto una pérdida el 2,9% del poder adquisitivo. Recordaron también que sus ingresos están muy por debajo de los de los países de nuestro entorno. GARA
El Parlamento aprobó ayer, con los votos a favor de PSN, NaBai, Bildu e I-E, dos mociones por las que la Cámara «muestra su rechazo a las medidas» anunciadas a finales de diciembre por el Gobierno de Rajoy.