En la Bundesliga el campeón ya está decidido, y el subcampeón, y hasta se ha confirmado que el SpVgg Greuther Fürth ya es equipo de Primera. Hace no demasiado tiempo, en 1987, descendía a la liga regional bávara, la sexta categoría del fútbol alemán. Hoy, los Tréboles, como les llaman, sueñan ya con medirse a los Dortmund y Bayern, y para hacerlo tendrá el respaldo de uno de sus más famosos fans, Henry Kissinger, ex ministro de Asuntos Exteriores de Estados Unidos, nacido en Fürth en 1923, y que ha prometido que, a sus 88 años, asistirá en persona al primer partido en casa en la próxima Bundesliga.

Pero en el fútbol germano estos días se habla más de las idas y venidas de jugadores. Del portero treinteañero del Werder Bremen que pretende el Real Madrid, de la confirmada marcha de Lukas Podolski, a sus 26 años, del Colonia al Arsenal -«Hi Leute, ab der kommenden Saison werde ich beim FC Arsenal spielen», como confirmó en su twitter-, o del fichaje de la perla Marko Marin por el Chelsea a cambio de 9 millones de euros al Bremen más la cesión de Romelu Lukaku. Pero el nombre que está en boca de todos es el de Lucas Barrios, delantero paraguayo del reciente campeón, el Borussia Dortmund, que acaba de firmar por el nuevo mecenas fútbol chino, en concreto el Guangzhou Evergrande, una de las relevaciones este año de la Champions asiática y el mismo club que ató en su día al casi desconocido argentino Darío Conca por una millonada de escándalo. El porqué Barrios ha aceptado la propuesta es muy sencillo: el ariete va a cobrar 100.000 euros semanales. El equipo alemán recibe por la ficha de Barrios 12 millones y él un contrato por 4 años, a razón de 6,5 millones por campaña.

Antonio Cassano volvió a marcar

Menos mal que no todo es dinero en el fútbol y a veces un título vale su peso en oro. «Es un momento realmente emocionante», acertó a pronunciar el técnico del Ajax Frank de Boer, después de que el conjunto de Amsterdam ganara su segundo título de liga de forma consecutiva desde 1996, tras su triunfo este miércoles, y después de que a mediados de febrero tuviera 8 puntos menos que el PSV Eindhoven, entonces líder. Respira el conjunto capitalino al que un renacido Feyenoord le pisaba los talones, porque en otras ligas europeas donde todo parecía claro haste hace poco, las cosas, en cuestión de días, ya no lo están tanto.

En la Seria A italiana se aprieta la cabeza, después de que a mitad de semana el Milan se colocara a un punto del liderato gracias a su victoria y al empate del primer clasificado, la Juventus. Terceros en discordia son el Napoli del Matador Cavani -que suma ya 23 tantos, a tan solo tres del máximo artillero Zlatan Ibrahimovic- y el Udinese.

Lo más llamativo del fútbol italiano, al margen de la agresión del entrenador de la Fiorentina Delio Rossi a su jugador Adem Ljajic cuando éste le aplaudio irónicamente tras ser reemplazado, ha sido el tanto el fin de semana de Antonio Cassano, seis meses después de sufrir un grave problema en el corazón. «Si me doy cuenta de que no soy el de antes daré las gracias a todo el mundo y me iré a casa», dijo. Pero Fantantonio ha vuelto para quedarse.

Otro tanto sucede en la Ligue 1 francesa. Parecía que el Montpellier se llevaría la Liga de calle tras el anterior tropiezo del PSG, pero los parisinos vuelven a colocarse a solo tres puntos del líder gracias a la victoria entre semana con goles del brasileño Nené y del argentino Javier Pastore, mientras que los Dogos del Lille, del magistral belga Eden Hazard, siguen terceros. La otra nota destacada en el fútbol francés es que el Olympique Lyonnais alzó su quinta Copa francesa al bajar del sueño al modesto US Quevilly, de tercera división, en el Stade de France. Un club que había obrado el milagro de eliminar al Marsella o al Rennes, y cuya prima por vencer la copa de Francia ascendía a 12.500 euros por jugador y entre 4.000 y 5.000 en caso de derrota, que es lo que se han llevado.

Las espadas en todo lo alto se mantienen igualmente en la competida Premier League. El derbi de Manchester del fin de semana dejó con ese 1-0 el título a los pies de los citizen de Mancini -que en abril estaban 11 puntos por debajo de los de Ferguson-, aunque a falta de dos encuentros tienen un hueso duro de roer este fin de semana, ya que visitan a un Newcastle que este miércoles ganó 2-0 al Chelsea -dos goles más del senegalés Papiss Cissé, que lleva 13 en 11 partidos- y que empata a puntos en el cuarto puesto con el Tottenham, y a un solo punto del Arsenal, tercero. La batalla por la Champions está muy cara este año en las Islas, tanto que el finalista europeo, el Chelsea, sexto, puede quedarse fuera.

Respecto al duelo de Manchester, con una rivalidad de más de 128 años, nada tuvo que ver con aquellos choques como el de diciembre de 1970, cuando George Best le rompió una pierna a Glyn Pardoe, y la lesión fue tan grave que el defensa del City estuvo a punto de sufrir una amputación; o el de marzo de 1974, cuando dos hombres del Manchester City, Mike Doyle y Lou Macari, vieron la tarjeta roja pero se negaron a abandonar el terreno de juego. Un gol de cabeza de Kompany a la salida de un córner bastó al City para llevarse un partido en el que el United no disparó entre los tres palos ni una sola vez. Jugó Ryan Giggs, que fue titular por primer vez con los red devils un 4 de mayo de 1991, precisamente ante el City y marcó. De Gea tenía por aquel entonces 5 meses; su compañero red Phil Jones ni había nacido.

Más encaminadas están las cosas en otras ligas. Por ejemplo, en la Jupiler Pro League belga, donde el Anderlecht le saca seis puntos al Brujas a falta de cuatro partidos para el final. Y más que sentenciada está en Portugal, donde los Dragones del Porto ya son campeones -ocho títulos en diez temporadas- y celebran el campeonato en casa este fin de semana ante un Sporting de Portugal que pelea por la tercera plaza. El Basilea se aseguró su decimoquinto título de la Liga suiza, el tercero consecutivo, mientras que en Rusia, ni siquiera la celebración de Samuel Eto´o, `robándole' el sombrero a un policía que estaba trabajando en el escenario del partido, ha eclipsado el campeonato alcanzado por el Zenit de San Petersburgo. Ya son cinco temporadas las que han pasado desde la última vez que el trofeo de la liga rusa recaló en Moscú, cuando en las 11 campañas anteriores habían terminado con un campeón moscovita. Es el tercer título que conquista el Zenit, todos ellos en los últimos cinco años, por dos logrados por el Rubin Kazan.

Para acabar, felicitaciones al veintenañero Neymar, que anotó su gol 100 con el Santos. «Está al nivel de Messi y Ronaldo», ha dicho el exbarcelonista Deco.