Ambiente festivo en el txupinazo por los imputados en los sanfermines de 2010
La ikurriña fue ayer protagonista en el txupinazo del 5 de mayo de la escalera sanferminera, para denunciar las penas de cárcel a las que se enfrentan trece jovenes por desplegar una ikurriña en el txupinazo de 2010. Denunciaron que los incidentes, en los que hubo un herido grave, son resultado de la actuación desproporcionada de la Policía Municipal a las órdenes de UPN, obsesionado con invisibilizar los símbolos vascos.
GARA |
Gigantes, zanpantzar, dantzaris y txalaparta, entre otros, pusieron Iruñea a mediodía de ayer en pie de fiesta dos meses antes del mítico 7 de julio, coincidiendo con la escalera sanferminera que glosa la canción; 5 de mayo, 6 de junio... Una iniciativa envuelta de ambiente festivo para una protesta que estuvo presidida por una gran ikurriña, que portaron algunos de los 13 jóvenes imputados por los incidentes ocurridos en el txupinazo sanferminero de 2010 y rodeada de gritos de «Ikurriña bai, espainola ez», además de una gran pitada dedicada al Ayuntamiento iruindarra.
El acto, convocado por el movimiento por los derechos civiles y políticos Eleak, denunció que 13 jóvenes de Iruñerria serán juzgados próximamente por intentar desplegar una ikurriña en la plaza consistorial, ante agentes de la Policía Municipal que se emplearon «con porras convencionales, porras extensibles e incluso a puñetazos» en unos incidentes en los que un joven madrileño resultó gravemente herido a consecuencia de un botellazo.
Siete meses después del txupinazo, 16 jóvenes fueron detenidos y acusados de desórdenes públicos, se denunció con el acto de ayer, poniendo el acento en las penas a las que se enfrentan los imputados, de entre dos y tres años de prisión para cada uno y de 5 años y 3 meses para el presunto autor del botellazo. La acusación particular pide 11 años de prisión para cada uno de los encausados, a los que acusa, además, de atentado a la autoridad, así como una pena de 17 años de cárcel y 350.000 euros de indemnización al presunto autor del botellazo.
Uno de los jóvenes acusados recordó la situación a la que se enfrentan por unos incidentes, en los que, según su opinión, la actuación de la Policía Municipal no fue «proporcionada», en su intento por impedir que se desplegara la ikurriña en la plaza, producto de la «obsesión de UPN por intentar borrar todo lo que tiene que ver con la cultura vasca», una impresión que comparte Eleak, quien ya denunció días atrás que «los incidentes que se produjeron en la plaza son responsabilidad de UPN y su Policía Municipal, que entraron temerariamente a censurar la ikurriña, apalearon a decenas de jóvenes y provocaron una situación de gran peligro».
Desde Eleak subrayaron que la fecha de ayer era la «idónea» para denunciar la sinrazón del Gobierno municipal de Iruñea y mostrar que mucha gente en Iruñea defiende que la ikurriña debe estar presente en las fiestas. Eleak expresó el deseo de que la ikurriña esté presente «con normalidad» en sanfermines, porque prohibirla supone una «conculcación de derechos».
Música en la calle, los zanpantzar y dantzaris, unidos a una importante presencia de ikurriñas mostraron el apoyo popular a la enseña vasca y denunciaron el juicio al que se enfrentan 13 jóvenes de Iruñerria.