La Vuelta al Bidasoa reunirá desde hoy al mejor pelotón sub 23 en una de las citas ineludibles y de más prestigio del calendario amateur. Los 19 equipos en liza tratarán de brillar en un recorrido exigente y suceder en el palmarés a los tres últimos ganadores rusos.

El Lokosphinx no faltará en la línea de salida y tratará de conseguir su cuarta victoria consecutiva tras las de Shalunov, Shilov e Igantiev. Su mejor hombre debe ser Rybalkin, segundo en la clásica Santa Cruz de Legazpi. El Caja Rural será la referencia, con Grijalba, Domene o Salas y el equipo a batir. Mientras que el Azysa-Telco-Conor cuenta con el argentino Sívori como principal aspirante.

Las alternativas llegarán del Estado español, con el Supermercados Froiz, que presenta a Holgado y Angulo, y el Extremadura-Spiuk, con los chilenos Alvarado y Bravo. Dos formaciones como Lizarte (Pedrero, Ramírez y Márquez) y Diputación de Ávila (Nacho Pérez, Martín y Rubio) pueden ofrecer mucho juego y luchar junto con los favoritos.

Naturgas, con Larrinaga y Chetout, Debabarrena y Bidelan-Kirolgi tratarán igualmente de asomar entre los primeros, igual que Seguros Bilbao o los cántabros del Gomur. Cafés Baqué, Koplad-Uni2, Gopar, Kanpazar, Ibaigane Opel cierran una participación de 19 equipos.

El recorrido se presenta atractivo como siempre. La primera jornada en Irun se antoja como la menos decisiva, aunque siempre depara alguna sorpresa. Jaizkibel, a solo 11 kilómetros de la meta, será el juez en la segunda etapa. La novedad esta edición es la jornada del viernes en Orio y con Aia a 13 de la llegada. El ganador y el podio se deben decidir en el tradicional y duro último día con Aritxulegi, Agiña y Erlaitz.

La flor y nata sub 23 tratará de inscribir su nombre en una carrera que en su día ganaron Cabestany, Olano, Rubiera, Unai Osa, Sastre, Koldo Gil, Herrero o Luengo.