Los sindicatos se reunieron ayer con la dirección en Lasarte para tratar el ERE planteado el viernes por la empresa y que afectará a 2.200 trabajadores de las plantas de Gasteiz y Lasarte. Previamente, se llevó a cabo una reunión del comité intercentros en la que, según fuentes del sindicato LAB, «quedaron en evidencia dos posturas contrapuestas»: la de quienes consideran que no existen motivos para el expediente y la de quienes están dispuestos a negociar las condiciones del ERE, en alusión a CCOO, UGT y CSI, sindicatos que ostentan la mayoría del comité intercentros.

LAB insistió en que Michelin se encuentra en una buena situación económica, ya que el grupo obtuvo en 2011 un beneficio de 1.400 millones de euros, un 39% más que en el año anterior, y en el primer trimestre de 2012 la facturación ha crecido un 5%.

Ante estos datos, LAB considera que lo que la empresa quiere hacer es «cargar sus problemas de producción sobre los sueldos de los trabajadores y las ayudas públicas». Por ello, reiteró que no apoyará el expediente y defendió la unidad sindical «y la lucha de los trabajadores» para hacer frente al mismo

Mientras tanto, CCOO, UGT y CSI demandaron ayer que se garantice el 90% del salario bruto para los empleados afectados, frente al 70% que baraja complementar la empresa, y que se ponga en marcha un plan interno de formación de manera que los trabajadores que se sumen al mismo reciban el 100% del salario los días en los que se imparta. También reclaman que el ERE no afecte a las pagas extraordinarias ni a las vacaciones y que se aseguren también los contratos con las empresas subcontratadas y externas.