Abbas alerta del peligro de «una catástrofe» si muere algún preso
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, alertó sobre el peligro de que la muerte de alguno de los presos en huelga de hambre desate «una catástrofe nacional que nadie puede permitirse. La situación es extremadamente peligrosa». Ayer, dos presos, uno militante de Al-Fatah y otro de Hamas, iniciaron también una huelga de sed.
GARA | RAMALLAH
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, calificó de «extremadamente peligroso» el estado de los presos en huelga de hambre, cerca de 2.000, y, en especial, de Taher Halahla y Bilal Diab, que llevan 76 días en huelga de hambre. Admitió que «son días cruciales. Espero y rezo para que ninguno muera porque ello supondría un desastre de proporciones aún mayores. La muerte de alguno de los huelguistas podría desatar una catástrofe nacional, que nadie puede permitirse», advirtió durante una reunión del Comité Ejecutivo de la OLP.
Remarcó que ya ha abordado esta cuestión con el negociador israelí Yitzhak Molcho y con la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton.
«Los presos tienen derecho a un proceso justo. Estamos hablando de las condiciones de su encarcelamiento, y hasta ahora las autoridades israelíes no han satisfecho sus demandas a pesar de las conversaciones entre las partes. Se está actuando para poner fin a la crisis tan pronto como sea posible», manifestó. Un funcionario palestino, que prefirió no desvelar su identidad, filtró a AFP que ayer estaba prevista una reunión entre representantes del Servicio Penitenciario israelí, el servicio de inteligencia interior Shin Bet y el Gobierno, que podría ser «decisiva». No obstante, un portavoz del Servicio Penitenciario aseguró que desconocía la convocatoria de dicha cita.
El miércoles, decenas de palestinos se concentraron frente a la sede de la Presidencia de la Autoridad Palestina en Ramallah para protestar por su «negligencia» y por su fracaso a la hora de internacionalizar la causa y de lograr una condena internacional a la postura israelí.
Ayer, los presos Kamal Isa, militante de Al-Fatah, y Jamal al-Hour, de Hamas, anunciaron su intención de iniciar también una huelga de sed.
La pasada semana, el representante de los presos de Al-Fatah Jamal al-Rjoob dijo que habían admitido la mitad de las propuestas hechas por la administración israelí.
«Testamento» de Bilal Diab
Días después, el asesor político del primer ministro de Hamas, Yousef Rizqa, denunció los intentos de Israel de dividir a los huelguistas utilizando para ello su militancia política.
Precisamente en una «carta-testamento» enviada el sábado a sus padres residentes en el distrito de Kufr Rai, en Jenin, Bilal Diab, perteneciente a la Yihad Islámica, reiteró en su 75 día de huelga de hambre su «determinación y paciencia para seguir con la protesta pese a las conspiraciones, amenazas y el aislamiento al que nos somete la administración penitenciaria».
«Obtendremos la victoria, pero solo a través del martirio o de nuestra inmediata excarcelación y no por medio de soluciones parciales como las que proponen las prisiones», subrayó. Asimismo, expresó su voluntad de ser enterrado según la tradición islámica y que sea inhumado por el expreso Khader Adnan -que estuvo 66 días en huelga de hambre en contra de su «detención administrativa». En cierta medida se le considera junto a Hana Shalabi (43 días de ayuno por los mismos motivos) precursor de esta masiva huelga de hambre-. También pidió que en su funeral se repartan dulces como «signo de celebración».
En contraste con el escaso y tardío impacto que la huelga de hambre está teniendo en la comunidad internacional, en los territorios palestinos se suceden a diario las muestras de solidaridad. Los familiares han instalado carpas en varios puntos de Cisjordania y Gaza, a las que continuamente se acercan ciudadanos y políticos.
Ayer, decenas de jóvenes se concentraron a las puertas de las organizaciones internacionales en la Ciudad de Gaza, bloqueando por espacio de dos horas los accesos a la sede del Comité Internacional de la Cruz Roja y de dos agencias de la ONU, en las que colocaron carteles con el lema «Cerrad hasta que las demandas de los presos sean satisfechas».
El ministro de Medio Ambiente israelí, Gilad Erdan, miembro del Likud, sugirió ayer un corte de electricidad a la Franja de Gaza en caso de que Israel sufra restricciones en su propio territorio.
«Este verano, la producción energética será menor que la demanda. Si, en tal caso, debemos imponer restricciones, propongo que cortemos el suministro a Gaza, porque representa el 4,5% de nuestra producción. Sería absurdo que los israelíes fueran los primeros en sufrir las restricciones mientras mantenemos el suministro a Gaza, que no paga», dijo en una carta a varios ministros. Este año, Gaza experimenta la peor crisis energética de su historia. GARA
La Federación General de los Sindicatos Independientes palestina convocó para hoy un paro mundial de diez minutos «en defensa de la dignidad humana». Pidió que a las 11.00, hora palestina (las 12.00 en Euskal Herria), todo el mundo salga a la calle y deje lo que está haciendo.
La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) calificó ayer de «poco clara» la respuesta de Israel a una carta remitida el mes pasado por Mahmud Abbas, que buscaba reactivar las negociaciones de paz.
«La carta no contiene una respuesta clara a los asuntos centrales que obstruyen la reanudación del proceso de paz, sobre todo a la cuestión de los asentamientos», afirmó en un comunicado leído por el secretario general de su Comité Ejecutivo, Yaser Abed Rabbo.
El Comité se reunió en Ramallah para estudiar el contenido de la citada misiva, que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, despachó el sábado a Abbas a través del negociador Itzhak Mojo.
Por ello exhortó al Cuarteto de Madrid -compuesto por EEUU, Rusia, la ONU y la UE- a «intervenir de forma decisiva para corregir el camino que sigue el proceso de paz». GARA