El 18 de mayo de 2009, el Ejército de Sri Lanka proclamó la «derrota militar» de la guerrilla tamil tras 26 años de guerra, después de una masacre en la que murieron y desaparecieron decenas de miles de personas, y tras la que la población civil fue recluida en campos de concentración. El final de la guerra llegó cuando el Ejército cingalés acorraló y aplastó a la guerrilla de los Tigres Tamiles en el noroeste de la isla, junto a la población civil en fuga. El Gobierno de Sri Lanka ha preparado la conmemoración con una semana dedicada a los «héroes de guerra», en la que el acto central será mañana un desfile militar.

Por otra parte, el político opositor de Sri Lanka Tiran Alles declaró ayer que cree que el presidente ceilandés, Mahinda Rajapaksa, ordenará dentro de poco la liberación del exjefe del Ejército Sarath Fonseka, considerado como uno de los artífices de la operación que acabó con la guerrilla tamil. El arresto del general Sarath Fonseka, que se enfrentó a Rajapaksa en las elecciones presidenciales de 2010, provocó críticas de los países occidentales. EEUU ha pedido en varias ocasiones la liberación del militar.