El líder del PSE de Gipuzkoa compareció ayer ante la prensa, en Donostia, para hacer balance del año transcurrido desde las elecciones municipales y forales. Aunque su análisis se centró en criticar todo lo que ha hecho Bildu en este herrialde -salvo el acuerdo en materia fiscal consensuado con su partido, al que eludió referirse-, Iñaki Arriola tuvo tiempo para reflexionar sobre los escenarios que pueden surgir tras los próximos comicios autonómicos en la CAV.

Preguntado por un posible pacto entre PSE y PNV tras esas elecciones, apuntó que «históricamente ha sido posible», aunque puntualizó que en estos momentos la relación con el partido que lidera Iñigo Urkullu es «fría y distante».

De todas formas, como recogió Europa Press, el también consejero de Transportes del Gobierno de Lakua no se cerró a un posible entendimiento con los jeltzales, ya que «todo dependerá de los resultados electorales, del interés y de las propuestas». «Todo dependerá de un PNV que se mueve más en clave electoral que en clave de país», subrayó.

Al mismo tiempo, dijo que «no descarta» que tras las elecciones sea «factible» un acuerdo entre el PNV y la izquierda abertzale porque, según señaló, «ellos ya lo han dicho», en referencia a unas declaraciones sobre el tema realizadas por el portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Josu Erkoreka.

Contra Bildu

Previamente, Iñaki Arriola había dedicado el grueso de sus críticas a Bildu, si bien de paso acusó al PNV de ser «la garantía» de que la coalición soberanista gobierne en Gipuzkoa porque «se ha negado» a posibilitar que salga adelante una hipotética moción de censura contra el Gobierno foral y porque ha dado su apoyo a la Diputación para aprobar los presupuestos.

Aunque en los últimos tiempos los cargos institucionales del PSE en Gipuzkoa dedican la mayoría de sus comparecencias públicas a criticar las iniciativas que sucesivamente va planteando el gabinete presidido por Martin Garitano, ayer Arriola volvió a utilizar el tópico de que Bildu ha «paralizado» el territorio. Llegado a ese punto, también criticó el programa de gobierno presentado la semana pasada por el diputado general, que calificó de «hipotético», agregando que es una «desfachatez» que Bildu solo presente «vaguedades».

En este balance del primer año de legislatura en Gipuzkoa, Arriola no hizo autocrítica por la pérdida de presencia institucional que sufrió el PSE a raíz de los malos resultados que obtuvo en las urnas.