GARA > Idatzia > Iritzia> Paperezko lupa

Maite SOROA | msoroa@gara.net

Contra los mineros

Los mineros de León y Asturias llevan varias semanas movilizándose por el futuro de un sector al que se lo están poniendo cada vez más crudo. Con un gran apoyo popular y haciendo frente a los uniformados, están poniendo en un brete al Gobierno del PP, criticado incluso por cargos locales de este partido. Así que desde la derechona han decidido contraatacar criminalizando la lucha minera. Así, en «La Razón» le dedicaban al tema uno de sus «Puntazos» en el que afirmaban que «las primeras víctimas de la violencia desplegada por una minoría radical contra la Policía y la Guardia Civil en las comarcas mineras son los propios trabajadores». Pues servidora opina que los trabajadores son víctimas de la violencia desplegada por la Policía y la Guardia Civil, que puestos a violentar, no son mancos. Pero para el diario de Marhuenda «la demencial agresividad de los piquetes que se ocultan bajo un pasamontañas tiene un efecto letal sobre la justa reivindicación de los mineros y arruina la solidaridad de los ciudadanos». Lo que tiene un efecto letal sobre la reivindicación de los mineros es que no les hagan caso y que tengan que dar leña para que les presten atención. Y para acabar, la advertencia: «Si los sindicatos no ponen coto a esta inaceptable `kale borroka', se convertirán en cómplices de los matones y deslegitimarán la causa minera». Visto lo visto, una tiene claro quién es cómplice de los matones...

En parecidos términos se expresaba José Antonio Gundín en su columna de «Elsemanaldigital», donde decía que «lo más más grave, sin embargo, de la revuelta minera es su deriva violenta y antisistema que le está haciendo perder a chorros la simpatía del resto de los ciudadanos españoles. Las imágenes que han ocupado estos días las primeras páginas de los periódicos y de los telediarios son mortales para la causa minera. Es verdad que se trata de una minoría de extrema izquierda y borroka, pero su protagonismo es tan indiscutible que contamina a todos los mineros. Los cortes arbitrarios de autovías y carreteras, los ataques a la Policía y la Guardia Civil, las agresiones a periodistas y comerciantes, las amenazas y bravuconadas... están generando una fuerte animadversión en amplios sectores sociales, cuyas principales víctimas son los mineros y sus familias». Pues, la verdad, a mí cada vez me resultan más majos.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo