Alemania se llevó el triunfo por países en la edición número 21 de los Campeonatos de Europa, la primera que ha coincidido en año olímpico, desbancando a Rusia de la primera posición que venía ocupando desde 1998. El equipo germano obtuvo 16 medallas, seis de ellas de oro que son las que deciden el puesto, mientras los rusos, con la mayoría de sus atletas destacados reservándose para los Juegos de Londres, se quedaron con 15, cinco oros.

La docena de finales de la jornada de clausura tuvo su punto álgido en el concurso masculino de pértiga. El viejo Estadio Olímpico de Helsinki es un escenario agradecido con la disciplina más técnica de los saltos. Allí fue en 1983 donde el gran Bubka se proclamó campeón del mundo por primera vez en su vida luciendo la camiseta de la Unión Soviética y con un salto de 5,85 metros. También allí, la rusa Yelena Isinbayeva ejecutó los 5,01 metros durante el Mundial de 2005.

Ayer Lavillenie y Otto protagonizaron un duelo intenso de saltos y sonrisas en el que finalmente el francés logró conservar el título logrado en Barcelona. Bajo el sol, Lavillenie, que empezó con nulos se alió después con el listón de tal forma que, pese a que estuvo a punto de caer prácticamente en casi todas sus ejecuciones, no terminó de hacerlo superando en su primer intento 5,87, 5,92 y 5,97, para atrancarse en 6,02. Su rival alemán, que aterrizó en la capital finlandesa como líder mundial del año con 5,91, pasó en 5,87 para intentar directamente los 5,92, altura que superó a la segunda. Ahora, será Lavillenie quien se ha ido con la mejor marca mundial del año .

En la jornada de clausura también se proclamaron campeones el alemán Sebastian Bayer (8,34) en longitud, el noruego Henrik Ingebrigtsen (3:46.20) en un accidentado 1.500 con abundancia de codazos y caídas, el ruso Sergey Shubenkov en 110 vallas (13.16), y lor relevos de Holanda con Martina (4x100, 38.34) y Bélgica con los gemelos Borlee (4x400, 3:01.09). La turca Asli Çakir-Alptekin (4:05.31 en 1.500), la portuguesa Dulce Félix (31:44.75, en 10.000), las alemanas en el relevo corto (42.51) y las ucranianas en el largo (3:25.07), junto a la polaca Wlodarczyk en martillo (74,29) y la croata Perkovic en disco (67,62) son las nuevas campeonas.