Maite SOROA | msoroa@gara.net
Qué decir ante la próxima lehendakari
Laura Mintegi fue presentada oficialmente como candidata a lehendakari de la coalición Euskal Herria Bildu, y ya que como la profesora y escritora tiene un currículum que para sí quisieran sus contrincantes, y por ahí no tienen por donde pillarle, columnistas y editorialistas optaron por decir sandeces contra quien es posible que lleve las riendas de la CAV durante cuatro años. En esa tarea, la de decir gañanadas, destacó ayer Ignacio Camacho, en su columna de «Abc», desde donde apuntaba que «a Mintegi, que es mujer leída y escrita, académica, historiadora y novelista, la han designado para que maquille con sonrisas doctorales el rostro hosco, desapacible e iletrado de la nomenclatura filoterrorista, poblada de tipos espesos, cetrinos y malencarados que dan la impresión de llevar en la oreja un pinganillo para recibir órdenes del lado oscuro. O para darlas, nunca se sabe». Y servidora se pregunta, ¿se habrá visto este hombre en el espejo? Porque para cetrino... Pero lo mejor es cómo acaba la pieza. Lean, lean: «Con esta candidatura de apariencia intelectual respetable el batasunismo trata de trascender su elemental y hemipléjico discurso de ikastola para dotarse de una pátina universitaria con la que revocar su fachada siniestra de etarras reconvertidos en comisión de servicios». Vamos, no sabe por dónde agarrarle y tira por donde suele...
En «La Razón» llamaba la atención el artículo firmado por Borja Semper, dirigente guipuzcoano del PP, en el que, miren por donde, pedía ayuda. Así como lo leen: «Pido ayuda para que en mi tierra no sean protagonistas día sí y día también; para que hacer campaña para EH Bildu no sea más fácil que hacerla para el PP, porque la atención que los medios les ofrecen ni de lejos la tenemos los demás». Parece que tiene envidia Semper. Aunque que uno del PP se queje de falta de atención mediática tiene guasa.
Aunque llamativo era cómo presentaban a la candidata en la Primera de «Deia». A su juicio, Laura Mintegi es «una apuesta en la ortodoxia de la izquierda abertzale». Una no sabe si Laura es ortodoxa, heterodoxa o un poco de las dos cosas, pero si quieren buscar un candidato «ortodoxo», que mejor que el de los jeltzales, que va a ser el presidente del partido. No saben qué decir.