El emblemático reloj de los jardines del Ferial volverá a funcionar tras la temporada estival -concretamente, durante el mes de setiembre- toda vez que el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Gernika ha encargado ya su arreglo.

El equipo de gobierno municipal, de Bildu, precisó que ha sido necesario recurrir a los fabricantes de este especial artilugio, la empresa bilbaina Santos Alonso, que lo construyó en los años sesenta.

En una nota, el alcalde, José María Gorroño, indicó que la medida viene motivada por «los continuos actos de gamberrismo que se producen los fines de semana», ya que algunas personas «se dedican a utilizar las agujas del reloj como si fueran una ruleta, lo que hace que se fuerce el mecanismo de los engranajes y se rompa».