La dirección de la planta de Azpeitia y los miembros del comité de empresa están citados hoy a las 9.00 de la mañana en Donostia en la sede del PRECO (Procedimientos Voluntarios para la Solución de Conflictos Laborales), en un último intento de mediación antes de pasar directamente a la ejecución de los despidos de otros sesenta trabajadores.

Desde el comité no se muestran muy esperanzados, tras la experiencia negativa del trámite del periodo de consultas previo a la puesta en práctica del ERE. «Las reuniones no han servido para nada porque la empresa se niega a cualquier acuerdo y sigue planteando como imprescindibles los sesenta despidos», señalaron ayer desde el comité.

Tras el encuentro de hoy con la dirección, el comité acudirá a la Delegación de Trabajo de la capital donostiarra para presentar el informe que ha elaborado con el relato completo del conflicto y las alternativas a los despidos que han planteado los representantes de los empleados. «No queremos que puedan agarrarse a que no ha habido buena voluntad por nuestra parte», manifestaron.

Por otra parte, también ayer quedó suspendido el juicio que se iba a celebrar en el Juzgado de Azpeitia contra dos miembros del comité de empresa a los que la dirección de Corrugados, y más en concreto su gerente, había denunciado por daños con motivo de unos incidentes durante este largo conflicto laboral. El gerente, que figuraba además como testigo acusador, no se presentó y sus abogados entregaron un escrito del departamento de Recursos Humanos de Corrugados por el que retiraban la denuncia.

El comité de empresa valoró este gesto de la dirección como «una forma lavarse la cara por la mala imagen que tienen por los despidos».