tour | Declaraciones
«Tenía mucha rabia dentro»
Sánchez reconoció que «la dificultad en conseguir la victoria me ha permitido conocer la importancia de lo que significa ganar en el Tour».
GARA | DONOSTIA
Luis León Sánchez (Rabobank), que sumó en Foix su cuarta victoria en el Tour, dedicó el triunfo, como siempre, a su hermano fallecido, a su familia y a sus compañeros, y aseguró que el triunfo llega tras una ronda gala que comenzó mal, con una caída en la que se dislocó una muñeca. «Este año parecía imposible que ganáramos una etapa, pero al final lo hemos logrado. Comencé con la caída en Lieja y al principio no encontraba las buenas piernas para atacar. Lo intenté a principios de semana, pero al final ganó Voeckler», aseguró el corredor murciano.
Se mostró satisfecho con el triunfo logrado en una larga escapada en la que también había hombres fuertes. «Sabíamos que con Sagan y Gilbert sería difícil. Sagan ha ganado hasta al sprint. Teníamos en mente arrancar de lejos, era la única oportunidad», admitió Luisle.
«Tenía mucha rabia dentro, porque siempre había tenido una victoria en la primera semana y este año parecía que no iba a llegar, pero cuando se lucha, al final termina saliendo», afirmó antes de reconocer que se le pasó por la cabeza marcharse del Tour sin victoria, ya que en dos ocasiones lo intentó sin conseguirlo, mientras que en las ediciones anteriores había ganado tras meterse en una primera escapada.
«La dificultad en conseguir la victoria me ha permitido conocer la importancia de lo que significa ganar en el Tour», dijo.
En la escapada también participó Gorka Izagirre (Euskaltel), quien felicitó al ganador de la etapa: «Lo hemos intentado una vez más, pero Luis León es un tío que tiene mucha experiencia en los momentos decisivos de carrera. Hay que felicitarle y nada más. Pensábamos que en el último puerto Sagan se podía quedar, pero es un artista y ha aguantado bien».
Por alusiones, Peter Sagan (Liquigas) reconoció su fallo por dejar que Luis León Sánchez se escapara. «He cometido otro error al dejar ir a Luis León Sánchez, pero no tenía más fuerzas. De todas formas ha sido una llegada muy difícil. Si no hubiera atacado Sánchez, todos habrían estado pendientes de mí. Estoy contento con la segunda posición», recalcó el eslovaco.
«Por el momento voy a pensar en ganar las clásicas, y cuando lo logre, quizá me aburra de ganar etapas y piense en una victoria en una gran carrera por etapas», concluyó Sagan.
La etapa se vio envuelta en una polémica por culpa del sabotaje de unos clavos que marcaron la jornada. Uno de los mayores perjudicados fue Cadel Evans (BMC), que tuvo hasta tres pinchazos en su bicicleta. «He tenido un día dramático», resumió el propio australiano.
Finalmente, todo quedó en un sofocón, ya que Evans, con ayuda de varios compañeros, se reintegró al pelotón principal. «¿Si no llegan a estar mis chicos del BMC?», se preguntó el aussie en agradecimiento al buen trabajo de sus gregarios.
En este sentido, el corredor usurbildarra Haimar Zubeldia (RadioShack) señaló que el francés Pierre Rolland (Europcar) «no ha sido elegante» al atacar dentro del grupo de favoritos cuando algunos de ellos habían sufrido esos pinchazos.