Batera considera «inédito» el consenso logrado en torno a la colectividad territorial
Convencidos de que en el momento actual se reúnen las condiciones para la consecución de una colectividad territorial para Ipar Euskal Herria, abogan por impulsarla dentro de la ley de Descentralización.
Arantxa MANTEROLA | BAIONA
La plataforma Batera considera que, «cuando menos desde la reivindicación de un Departamento vasco en 1981», no ha habido una conjunción de posiciones tan clara en favor de una colectividad territorial específica para Lapurdi, Nafarroa Beherea y Zuberoa. Así lo subrayaron varios de sus miembros ayer, en Baiona. Es más, calificaron la situación como «inédita» e, incluso, «histórica» ya que se ha logrador aunar a diversos sectores políticos y sociales y también a electos de diferente signo.
Recordaron el trabajo de debate y reflexión que se está dando desde hace meses en el seno del Consejo de Desarrollo con la participación de agentes de todo el espectro de la vida social y política de Ipar Euskal Herria. La primera gran conclusión, que fue avalada en mayo por el Consejo de Electos, fue la de establecer la necesidad de una colectividad territorial específica.
Cuatro puntos básicos
Otros factores que confluyen en el contexto actual, como la reforma territorial o el cambio de la mayoría política hacen, según Batera, «que se den las condiciones para que la reivindicación del reconocimiento político-territorial de Ipar Euskal Herria pueda concretarse realmente».
Para la plataforma hay cuatro puntos básicos ineludibles a la hora de plantear la propuesta de colectividad territorial. El primero es que el perímetro geográfico sea el de Ipar Euskal Herria establecido ya cuando se creó el pays Pays Basque. El segundo es que sea evolutiva y no se constriña a las competencias mínimas que en un primer momento puedan otorgársele.
También piden que no se añada otra estructura en la organización administrativa sino que, «como mínimo se reemplace al Consejo General» y, por último, que se integre en la nueva ley de Descentralización.
Una vez acordada la creación de la colectividad territorial vasca, Batera cree que debería someterse a consulta popular en los dos años próximos con el fin de que, para 2015, pudiera ya constituirse la Asamblea de dicha institución con sus respectivos electos.
La Asamblea General del Consejo de Electos abordará el jueves una nueva fase del extenso debate que está llevando a cabo sobre la colectividad territorial propia en paralelo con el Consejo de Desarrollo. Esta vez se pronunciará sobre el esquema de competencias que debiera comprender dicha estructura institucional.
Batera espera que, «también en esta ocasión, el consenso entre los electos sea lo más amplio posible puesto que eso nos permitirá hacer más creíble la propuesta a plantear a París». Después quedaría por zanjar el capítulo de la estructuración, funcionamiento y modo de elección de los representantes de dicha colectividad, algo que habrá que abordar tras el verano para que, para otoño, se pueda elaborar una propuesta concreta que se presentaría al Gobierno, «a poder ser, con la mayoría de apoyos posibles».
El objetivo es hacer que la propuesta vasca se integre en el debate del Acto 3º de la Descentralización que François Hollande prometió legislar a partir de diciembre. Previamente, el 3 y 4 de octubre habrá un gran debate sobre dicho tema a nivel estatal. Batera considera indispensable no perder ese tren. A.M.
