Bildu instó ayer al alcalde de Leioa, Eneko Arruebarrena, a que asuma sus responsabilidades políticas, en lo que definieron como «el escándalo de Pinosolo». Acusaron al primer edil de «ocultar información» y «decir medias verdades» en todo lo relacionado con el proyecto de construcción del controvertido polideportivo, lo que ha permitido hasta que la coalición lo desveló la semana pasada en el Consejo de Leioa Kirolak, que ocultase la conexión entre las empresas AFP Group y BM2 Arquitectos que participaron en los sucesivos comités que evaluaron las ofertas en el proceso de adjudicación.

El edil soberanista Arkaitz Fullaondo insistió en que el alcalde es el responsable directo de la conexión entre ambos comités, ya que admitió «que pidió a AFP Group nombres de empresas para contratar el segundo comité evaluador», después de que se rechazase el informe del primero por «parcialidad». En opinión de Fullaondo, «el escándalo es mayor si tenemos en cuenta que siempre que a Eneko Arruebarrena se le han pedido explicaciones sobre la contratación del segundo comité evaluador, se ha negado a dar ningún tipo de explicación».

El concejal recordó que AFP Group y BM2 Arquitectos son socias en la firma Innovación Deportiva lo que «desmonta» el mensaje del alcalde de que el proyecto ganador de Pinosolo fue evaluado por dos comités «independientes».