Dudas en Alemania sobre si el BCE tiene que comprar deuda española
El Banco Central Europeo (BCE) piensa comprar títulos de deuda soberana española a instituciones financieras y otros inversores, según informaciones que publicó ayer el diario alemán "Süddeutsche Zeitung". Según el periódico, que basa su información en fuentes de Bruselas, la idea es aumentar la demanda y presionar a la baja los tipos de interés. Sin embargo, el ministro alemán de Economía, Philip Roesler, advirtió al BCE que «no se inmiscuya».
GARA | BERLIN
El ministro de Economía alemán, Philip Roesler, ha advertido este sábado de que el Banco Central Europeo (BCE) no debe inmiscuirse en la financiación de los Estados miembros como «solución permamente», en referencia a la posible compra de deuda española e italiana, según informaron ayer de manera conjunta las agencias Europa Press y Reuters.
La función principal del BCE debe ser preservar la estabilidad de los precios y no financiar la deuda de los Estados. La compra de bonos de los gobiernos no puede ser una solución permanente», explicó Roesler en una entrevista publicada por el diario alemán «Neue Osnabruecker Zeitung». Así, ha defendido que el BCE «debe ser independiente. Solo se puede generar una nueva confianza en la eurozona manteniendo estrictamente la disciplina presupuestaria y aplicando reformas estructurales», recalcó.
El ministro de Economía alemán responde así a las declaraciones del pasado jueves del presidente del BCE, Mario Draghi, quien afirmó que haría todo lo fuera necesario para defender el euro, lo que fue interpretado como la posibilidad de que el banco comprase deuda española para aliviar la presión sobre la prima de riesgo.
Roesler ocupa la cartera de Economía y es además el vicecanciller por el Partido Liberal Demócrata (FDP), socio minoritario de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel.
El ministro ya protagonizó la semana pasada una agria polémica cuando defendió la salida de Grecia del euro como opción viable, lo que desató críticas de otros miembros del Gobierno y de su propio partido. En la entrevista publicada este sábado, Roesler ha rechazado estas críticas. «En mi ministerio hemos podido ver que el Gobierno griego no ha podido poner muchas cosas en práctica», precisó Roesler. En esa misma línea se manifestó Michael Fuchs, viceportavoz de la CDU en el Bundestag. «No se puede salvar a Grecia. Son simples matemáticas», comentó en declaraciones a la revista económica alemana «Wirtschaftswoche». «El Gobierno no tiene ni la voluntad ni los medios para aplicar las reformas», indicó.
El Banco Central Europeo (BCE) piensa comprar títulos de deuda soberana española a instituciones financieras y otros inversores, según informaciones que publicó ayer el diario alemán «Süddeutsche Zeitung».
Según el periódico, que basa su información en fuentes de Bruselas, la idea es aumentar la demanda y presionar a la baja los tipos de interés, que en los últimos días han superado la barrera del 7% en el bono a diez años. El BCE actuará en nombre del Fondo Europeo de Estabilización Financiera (FEEF) con el respaldo de los países miembros de la Eurozona, según el rotativo alemán. El diario relaciona esta información con la declaración conjunta que emitieron ayer la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande.
Los expertos prevén un recrudecimiento de la situación económica del Estado español en el segundo semestre del año, que llevará a una recesión más intensa, aunque descartan que el país se vaya a ver obligado a pedir un rescate total a sus socios europeos.
Los expertos consultados por Efe son pesimistas acerca de los datos que se conocerán el lunes sobre la evolución de los precios en julio y el comportamiento de la economía española en el segundo trimestre. Así, el estratega de Citi José Luis Martínez Campuzano estima que la contracción económica en el segundo trimestre estará en torno al 0,4 %, aunque advierte de que «lo más importante» es el comportamiento de los siguientes periodos, que podrían llevar a cerrar el año con una caída del PIB de entre el 1,8 % y el 2 %.
Por su parte, el economista jefe de Intermoney, José Carlos Díez, alerta de que «la recesión en los próximos trimestres va a ser muy intensa», ya que coincidirán tres factores negativos: la subida del IVA, el recorte de gasto y la caída de los pedidos de las exportaciones. A pesar de ello, los expertos coinciden en descartar que vaya a pedir un rescate como los de Grecia, Irlanda y Portugal y «confían en que las autoridades europeas tomen algún tipo de medida para evitarlo». La primera pista en ese sentido la dio el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, el pasado jueves, cuando aseguró que haría todo lo necesario para preservar el euro, una posición similar a la defendida por los gobiernos francés y alemán un día después, que ayer se puso en duda. GARA
