El republicano Mitt Romney viaja a Israel para hacerse con el voto judío
GARA | JERUSALÉN
El candidato republicano a la presidencia de EEUU, Mitt Romney, se reunió ayer en Jerusalén con líderes israelíes en una visita interpretada como un intento de elevar su figura en el ámbito internacional y ganar el voto judío, que aunque es numéricamente pequeño, será clave en las elecciones de noviembre en algunos estados. Para ello, Romney declaró su intención de respaldar a Israel si decidiera atacar a Irán para detener su programa nuclear. También regaló los oídos de sus anfitriones calificando a Jerusalén como capital de Israel, unas declaraciones que, según las autoridades palestinas, «afectan a los intereses americanos en la región, a la paz, a la seguridad, y a la estabilidad. Aunque se inscriben en el marco de la campaña electoral, son inaceptables y las rechazamos completamente», afirmó el negociador palestino Saeb Erakat.