Voleibol | Semifinales masculinas
Brasil y Rusia evitaron la sorpresa y pelearán por la hegemonía mundial
GARA | LONDRES
No hubo sorpresas. Las dos selecciones que encabezan el ranking mundial de voleibol, Brasil y Rusia, se enfrentarán en busca del oro olímpico.
Sería el tercero en el caso de los sudamericanos, que ayer no cedieron un solo set ante Italia (3-0). La selección transalpina no pudo repetir la campanada de cuartos, cuando derrotó al vigente campeón Estados Unidos, y aunque mantuvo el tipo en el primer set (25-21), sucumbió claramente en el segundo (25-12) y cayó con orgullo en el tercero y definitivo (25-21), aunque ya era consciente de que no tenía nada que hacer .
Algo más tuvo que sufrir Rusia para imponerse por 3-1 (25-21, 25-15, 23-25, 25-23) a la gran revelación de este torneo, Bulgaria, a la que todavía le queda el consuelo de poder pelear por la plata. La espectacular envergadura de los rusos -2'02 de media en el sexteto inicial- resultó decisiva para derrotar a su rival, que encajó ocho aces. Aunque más importante aún fue la reacción de Rusia en el primer set, cuando llegó a colocarse cuatro tantos por debajo en el marcador (17-13). Pero un parcial de 12-4 le permitió adjudicarse esa primera manga, para imponerse después con más claridad en el segundo set. La reacción búlgara fue insuficiente para frenar a una Rusia lanzada, de nuevo con Mikhailov en plan estelar.
La selección rusa tendrá mañana la posibilidad de conquistar su primer oro desde que se desgajó la Unión Soviética, que sí subió en dos ocasiones a lo más alto del podio.
Se repite la final
Estados Unidos y Brasil, por su parte, repiten hoy (19.30, hora EH) la final femenina de Pekín'08. Las norteamericanas, que han cedido dos sets a lo largo de todo el torneo, buscan su primer oro de la mano de Hugh McCutcheon.
No tendrá fácil repetir título Brasil. Con un equipo menos renovado que su rival, ha tenido que sufrir desde el inicio de los Juegos -cayó en primera ronda precisamente contra Estados Unidos (3-1)- para alcanzar de nuevo la final. Más vulnerables de lo habitual, las sudamericanas necesitarán que Sheilla Castro vuelva a ofrecer su mejor nivel si quieren tener opciones.