Banderas palestinas, ikurriñas, cohetes y cientos de personas, entre ellas los componentes del gobierno municipal y otros concejales, recibieron ayer en Donostia al velero «Estelle», que desde hace semanas surca los mares en dirección a Gaza con intención de romper el bloqueo al que Israel somete a los palestinos de aquel territorio y hacerles llegar ayuda humanitaria. La tercera Flotilla de la Libertad saldrá mañana rumbo a Bermeo un poco más cargada de solidaridad.

Esta tercera flotilla solidaria afronta una difícil y peligrosa misión, como dramáticamente se pudo comprobar durante las las dos campañas anteriores contra el bloqueo. Hace dos años, el «Mavi Marmara» fue atacado por el Ejército israelí y nueve tripulantes resultaron muertos y otros 50 heridos; el año pasado, los barcos de la segunda Flotilla de la Libertad quedaron bloqueados en aguas griegas. Contrasta la actitud comprometida de los participantes en esta campaña de apoyo a Palestina con la mantenida por la comunidad internacional, incluida la Unión Europea, la cual, incapaz de exigir a Israel siquiera que respete el derecho internacional y termine con el bloqueo de Gaza, se limita a mostrar su apoyo a un proceso de paz que no se sabe en qué consiste y con el que Israel tan cómodo se siente. Mientras, los gobiernos evitan mirar hacia la enorme prisión en la que se ha convertido la franja de Gaza.

La solidaridad es la principal arma con la que cuenta Palestina. Solidaridad internacional que incluye la presión a los gobiernos y a todas las instituciones, a los que es preciso exigir algo más que palabras y excusas; es decir, que defiendan con la misma vehemencia de la que en otras ocasiones hacen gala el derecho internacional, el libre tránsito de los palestinos y el final de la brutal represión a la que son sometidos. En ese sentido, la actitud del Ayuntamiento de Donostia ha sido ejemplar al implicarse en esta campaña, apoyándola y organizando, junto a la plataforma Gazatik Gazaruntz, actos para dar a conocer la situación que soportan los palestinos. Ojalá el «Estelle» reciba la carga solidaria recibida en Donostia en todos los puertos donde atraque.