Rafael Hernandez irurzun Donostia
¡Maldito sea por siempre aquel día!
¡Oh, noche cruel! Con estas palabras definía la junta de San Sebastián lo sucedido la noche de aquel 31 de agosto de 1813 hasta el 9 de setiembre tras retirarse el Ejército francés al castillo de Urgull y entrar en la ciudad los ejércitos español, portugués e inglés que la arrasaron e incendiaron, robando, violando, torturando y asesinando a la población civil, muriendo alrededor de 1.600 personas civiles y dejando en la indigencia y sin casa a más de 1.500 familias donostiarras.
Entre el 15 de agosto y el 8 de septiembre murieron 1.047 soldados franceses y 481 fueron heridos. Según los datos enviados por el general Graham a Wellington el 1 de setiembre de 1813, desde el 28 de junio, día que comienza el asedio de la ciudad, hasta el 31 de agosto murieron 503 soldados ingleses y 171 portugueses y fueron heridos 1.103 ingleses y 594 portugueses.
Por su parte, a partir del 31 de agosto murieron 261 soldados españoles, 51 ingleses y 88 portugueses y fueron heridos 1.327 soldados españoles, 334 ingleses y 386 portugueses.
Por lo tanto, en lo que hasta ahora se denominaba el «incendio» de San Sebastián de 1813, se puede decir, según Graham, que aquel día el Ejército español se encontraba en Donostia y que fue el que más activamente participó en la toma de San Sebastián, dado el gran numero de bajas que sufrió.