Champions League (fase previa)
Bera Bera se saca la espina
Las donostiarras cerraron su primera experiencia en la Champions League con una victoria convincente.
LC BRÜHL 23
BERA BERA 33
GARA
Bera Bera no dispuso de demasiado tiempo para reponerse de la decepción de su derrota ante el Laczpol el sábado, pero fue suficiente para asimilar el resultado y afrontar su encuentro ante el LC Brühl con la ambición de ganar. Era importante cerrar el primer capítulo de la Champions League con buen sabor de boca, aparte de que supusiera de paso ahorrarse una ronda eliminatoria de la Recopa.
El equipo suizo abrió el marcador en un contragolpe -que inmediatamente igualaba Elorza con su primer gol, anunciando una tarde destacada en esa faceta-, y marcaba sus tres siguientes goles de penalti forzados en combinaciones con los seis metros, y convertidos por su goleadora Tamara Bösch. Como ya había hecho el sábado ante el Viborg, el LC Brühl resistió durante el primer cuarto de hora, pero Bera Bera mejoró sus prestaciones defensivas, y también las de Zoqbi en la portería, lo que le permitió correr y jugar a su ritmo habitual.
Conforme pasaban los minutos la defensa donostiarra controlaba con mayor eficacia las evoluciones del juego ofensivo suizo, y la diferencia se estabilizó en 3-4 goles, aunque un acelerón al filo del descanso facilitó un parcial de 0-3 (con tres goles de las extremos, uno de Altuna y dos de Ziarsolo) que permitía a Bera Bera irse hasta el 17-11.
Con el partido encarrilado, Patricia Elorza -que disputó casi todos los minutos del partido- marcó los tres primeros goles de Bera Bera. La defensa seguía parando a las suizas, y Karrere iba repartiendo minutos entre sus jugadoras pensando ya en futuros compromisos. Eli Pinedo solo participaba en defensa, Ederra entraba por Núñez, y Arizaga sustituía a Rubio cuando la ventaja alcanzaba ya los diez goles.
Lo mismo que Elorza, Libe Altuna pudo desquitarse también de su escaso acierto goleador de la víspera, y mediada la segunda parte enganchó una racha de cuatro goles casi consecutivos desde el extremo. Arizaga, a dos minutos del final, cerraba la cuenta anotadora donostiarra.
Viborg gana al Laczpol (26-22)
En la final de la fase el Viborg hizo buenos los pronósticos y, ante un millar de espectadores, se impuso, aunque con dificultades, al correoso Laczpol polaco, donde destacaron Zych (6 goles) y Petrinja (5). La portera Darleux aguantó al Viborg en la primera parte (12-11), y una racha de 4 goles mediada la segunda mitad decantó el partido.
El primer contacto con la Champions League habrá proporcionado valiosas experiencias, y enseñanzas, a Bera Bera. A su plantilla, y a su directiva. En según qué torneos europeos, el tópico de que «nunca hay enemigo pequeño» no se corresponde con la realidad. Sí los hay, algunos incluso minúsculos. Bera Bera lo sabe porque se ha enfrentado a varios de ellos. Pero en la mejor de las competiciones cada paso adelante requiere superar grandes dificultades.
Este fin de semana un tricampeón de la Champions debía jugar la fase previa para poder llegar hasta la «verdadera» competición, la que empieza en la fase de grupos. Y tres rivales más pretendían sorprenderle. El LC Brühl ha resultado ser el más flojo, pero el Laczpol polaco, con una tarjeta previa casi en blanco en Europa, parecía asequible para Bera Bera. A la hora de la verdad, no lo fue. Era el campeón polaco, viajaba con las mismas ilusiones que Bera Bera, a una competición de lujo que aporta ánimos suplementarios a cualquier club que participe en ella, y demostró disponer de recursos suficientes para imponer su ley. Bera Bera pagó sus errores iniciales y luego fue a remolque, aunque enseñó los dientes en la segunda parte como para inquietar a sus rivales. Ambos clubes demostraron que en Champions no existe un «enemigo pequeño».
A Bera Bera seguro que la experiencia le ha gustado, y al mismo tiempo habrá quedado insatisfecho. Pero a partir de hoy toca mirar hacia adelante, sabiendo que en el futuro próximo el ranking EHF para la temporada 2013/14 vuelve a conceder dos plazas a la Liga española, y su campeón accederá directamente a la fase de grupos -como le correspondía a Itxako en esta edición-. Bera Bera aspira al título de Liga esta temporada, y deberá concentrar todos sus esfuerzos en hacer realidad ese éxito, importante por sí solo, y que además conduciría a la próxima Champions League sin necesidad de pasar por la fase previa.
Itxako ya pasó por el mismo proceso de adaptación. En su primera presencia en la temporada 2008-09 disputó la fase previa, en aquellos tiempos de cuatro equipos todos contra todos, y perdió ante el Podravka croata (que fue quien se clasificó) y ante el Leipzig alemán, ganando al Patras griego. Luego se reenganchó en la Copa EHF... y llegó a la final -precisamente ante el Leipzig-, la ganó y fue campeón. La experiencia de Viborg no es el final de nada, sino el principio del periplo 2012-13.
J.C. ELORZA
