El presidente del PP de la CAV, Antonio Basagoiti, se vio obligado ayer, al ser entrevistado por Radio Euskadi, a valorar la sentencia del Tribunal de Derechos Humanos que condena al Reino de España por la denuncia presentada por Martxelo Otamendi, quien, como consta en su relato, fue torturado por la Guardia Civil durante el periodo de incomunicación.

Basagoiti afirmó que «en Euskadi no hay un problema de torturas, la tortura no es lo importante» porque, dijo, no conoce a «ningún sector social, a ningún colectivo, a ningún partido político defendiendo la tortura».

La operación que supuso el cierre de «Egunkaria» fue llevada a cabo durante el mandato de José María Aznar como presidente del Gobierno español. Una vez que Otamendi diera cuenta de las torturas sufridas por él y otros de los arrestados, el entonces ministro de Interior, Ángel Acebes, protagonizó una insólita comparecencia pública para amenazar con querellarse contra ellos por «seguir a pies juntillas un manual de ETA que aconseja a sus militantes que denuncien torturas cuando son detenidos». De hecho, lo hizo, pero la querella fue archivada.

Basagoiti quiso subrayar que «lo que no dice» el Tribunal de Estrasburgo «es que se haya torturado», sino «que se tenía que haber investigado». Precisamente, por la falta de una investigación a fondo, el TEDH no puede pronunciarse sobre las torturas denunciadas.