El comité de Rinder Industrial se mostró satisfecho con la decisión judicial de no admitir el recurso de la empresa contra su decisión de anular el expediente de suspensión que había planteado para la planta de Gernika, según informaron ayer los miembros del comité en una rueda de prensa.

La compañía planteó el expediente para alrededor de 70 trabajadores desde enero, que fue recurrido y anulado en este momento. Ante los medios de comunicación explicaron que «a la clase trabajadora vasca nos tienen sumergidos en una dura situación socioeconómica, donde el capitalismo ultraliberal quiere destrozar a nuestro pueblo y a nuestra clase trabajadora. Los bancos se están llenado de dinero público y la clase política nos está imponiendo, reforma tras reforma, condiciones más duras de supervivencia», afirmaron.

Ante esa situación, el comité agradeció la solidaridad de la población de Gernika y de otros comités que «han mostrado con nuestra lucha. Por eso, decimos que necesitábamos tomar decisiones con honda perspectiva de lucha y dejar claro que esta decisión ha sido la que ha permitido rechazar y parar el expediente».

«Apología a la lucha sindical»

Los representantes del comité reconocieron que con este paso «no se va a acabar el conflicto», porque entienden que «sabemos que la empresa no se va a dar por vencida, ya que su hambre de explotación es insaciable, pero estamos contentos con esta pequeña victoria lograda por medio de nuestra lucha».

En este momento, el objetivo que se plantea el comité es «recuperar lo que nos han quitado, que era nuestro: los días de paro consumidos, los salarios perdidos, las cotizaciones, etc». Según confirmaron, Rinder Industrial, que hace unos años fue puesta como una empresa emblemática en cuanto a su asentamiento en la India, tienen pendiente el abono de media paga extraordinaria, una mensualidad y los 48 días consumidos del expediente de suspensión de empleo.

Los trabajadores manifestaron «con orgullo» que querían «aprovechar esta comparecencia pública para comunicar este éxito y para hacer una clara apología a la lucha sindical. Si no hubiéramos luchado, lo que nos quitó la empresa no lo hubiéramos recuperado. Ahí está el valor y la validez de la lucha», sentenciaron. Desde esa experiencia, el comité de Rinder Industrial llamó a la lucha y denunció que «aquí no existe democracia, porque en el mundo laboral está manipulada».