No veo que haya pasado nada en la CAN», proclamó, ufano, el portavoz del PSN, Roberto Jiménez, a la salida de la Mesa y Junta de Portavoces el pasado lunes. Pues debe ser de los pocos que en Nafarroa no vean que el proceso de descapitalización, desmembramiento y entrega de la CAN a Caixabank es, cuando menos, extraño. Quizá no haya visto que Nafarroa ha dejado de tener una caja pública y que el centro de decisión ha pasado a Barcelona, siendo ahora la CAN solo un 1% de una caja de ahorros de ámbito estatal.

Jiménez no ve nada raro y destaca que de las 45 cajas existentes en el Estado español 43 se han visto inmersas en procesos de fusión. Todas menos Caixa Ontinyent (Caja Onteniente, según la versión de Jiménez) y Caixa Pollença (Caja Pollensa, para el secretario general del PSN). Quizá le hubiera valido más a la CAN haber seguido el ejemplo de estas dos pequeñas cajas y no meterse en aventuras extrañas que han acabado como han acabado. O mirar hacia Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

En cualquier caso, Jiménez no ve nada raro en la CAN, ni en el peaje en la sombra ni en nada. Por eso, votó el PSN la pasada semana en contra de la creación de una investigación con amplias miras y pretendió que se aprobara otra con un alcance mucho más limitado.

Es uno de los dramas de Nafarroa. Hasta ahora siempre se ha necesitado al PSN para articular mayorías frente a UPN. Incluso el partido de Jiménez ha votado con los grupos de la oposición derrotando a Yolanda Barcina. Pero a la hora de la verdad, cuando toca posicionarse sobre un tema de calado, el PSN agacha las orejas y vuelve al redil.

«Somos un partido coherente. Si votamos una vez que no, volveremos a votar que no», respondió Jiménez ante el anuncio de NaBai de que volverá a solicitar otra comisión de investigación. No sé si los votantes que han dejado de apoyar al PSOE en Galicia estarán de acuerdo con lo de la coherencia. En Nafarroa de momento no lo sabremos, porque el PSN también apoya a Barcina para que no convoque elecciones. Por algo será.