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División de Honor femenina

Zuazo mereció incluso más

Tania Yáñez marcó 11 goles, entre ellos el empate definitivo, de penalti, a cinco segundos del final.

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ZUAZO BARAKALDO 26

ROCASA REMUDAS 26

 

Juan Carlos ELORZA

El empate en Lasesarre pudo ser justo, pero si algún equipo mereció ganar fue Zuazo. Durante 60 minutos mostró una voluntad férrea para sacar adelante el resultado, no se rindió en los peores momentos, y sus mejores jugadoras, cuando más las necesitó su equipo, dieron la cara.

El juego ofensivo de Zuazo en la primera parte transcurrió entre dos extremos: cuando el balón caía en manos de Yáñez el Rocasa temblaba -7 goles en la primera mitad-, pero sus compañeras de primera línea, sobre todo Bonilla, insistían demasiado en enviar pases -muchos de ellos no muy buenos- a la pivote, un recurso que se saldó con 3 goles de Hernández -letal cuando conseguía recibir de espaldas a la portería-, pero también con excesivas pérdidas de posesión, que un Rocasa agobiado por la defensa vizcaína en los ataques en posición aprovechó para marcar 6 goles de contraataque.

El toma y daca de la primera mitad se tradujo en equilibrio en el marcador hasta los cinco últimos minutos, en que Zuazo perdió un poco la brújula -con exclusiones de Bonilla y de Hernández incluídas, esta la segunda-, para irse 14-17 al descanso.

Rocasa marcó el primer gol en la reanudación (14-18), y planteó una defensa mixta de Albaladejo sobre Yáñez con la que pretendía finiquitar el partido. Pero Ana Temprano empezó su recital (9 paradas de 18 remates en la segunda parte, 50%); Patri Ahedo tomó la responsabilidad para romper la defensa canaria por el centro con sus fintas y penetraciones, con la colaboración de Bonilla; la guinda de un gol de Oihane Gil al contraataque, de rosca, en plena remontada... y cuatro remates más a los postes.

Del 17-20 se pasó al 22-20 cuando se cumplía el cuarto de hora, en 8 minutos en que Rocasa no pudo marcar, y el Zuazo empezaba a creérselo. Pero entonces llegó el bajón. Yáñez estaba un tanto desconectada del juego por la pegajosa defensa mixta, y sus compañeras parecían fundidas por el esfuerzo físico. Rocasa se rehizo con goles de Davinia López y Albaladejo, y el partido se puso muy cuesta arriba, 24-26 a 4 minutos del final.

Joseba Etxeberria pidió tiempo muerto en el 28, y a la vuelta Yáñez marcaba en suspensión y Temprano colaboraba con un paradón al remate a bocajarro de la pivote Rodríguez. Rocasa sufría, y su técnico pedía tiempo a 23 segundos para amarrar el triunfo. Pero a González se le escurría el balón, Vanessa Alvarez salía de estampida y Trojaola le hacía penalti. Yáñez, a cinco segundos del final, no falló.

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