«The Watch», que así se titula originalmente esta comedia gamberra, ha cosechado un rotundo fracaso en la taquilla de los Estados Unidos. Es la historia de un desastre anunciado, porque nunca creyó nadie en ella, ni siquiera dentro de la Fox, ya que al estudio le ha costado una década decidirse a producirla tras numerosos cambios de guión.

En principio iba a ser una versión infantil (¿todavía más?) de «Los Cazafantasmas». Finalmente, se contrató a la pareja de guionistas formada por Seth Rogen y Evan Goldberg para que introdujeran un humor explícito no apto para menores.

Patrulla vecinal

El espectador nunca sabrá lo que ellos escribieron, porque los actores han improvisado los diálogos y las situaciones que comparte el cuarteto estelar, salvando algunos momentos cómicos, aunque no una película que no tiene ninguna razón de ser.

Ben Stiller hace de adicto a la formación de grupos de voluntarios en todo tipo de actividades, hasta que reúne una patrulla vecinal de vigilantes. Él se lo toma en serio, y el resto solo quiere pasar el rato fuera de sus casas. Recluta a Jonah Hill, Vince Vaughn y Richar Ayoade. El afroinglés debuta en Hollywood como actor, coincidiendo en cartelera con su realización independiente «Submarine». Debe de tratarse de un caso bipolar, porque aquí caza extraterrestres.