Eder Díez | Futbolista
«El Chaves me ofreció un contrato de dos año, algo que no se puede desaprovechar»
Eder Díez acaba de aterrizar en la liga portuguesa y ya es uno de los hombres importantes del Chaves, que juega en la Segunda División. Tras pasar por las categorías inferiores del Athletic y del Celta recaló en el Lemona para marcharse el año pasado al Ourense. Ahora está conociendo una nueva liga.
Eder Díez jugó la temporada pasada en el Ourense y en esta ha avanzado 90 kilómetros para meterse en Portugal y jugar en el Chaves de la Segunda División. El jugador vizcaino está muy contento, ya que es indiscutible para el entrenador y siente el apoyo de todos sus compañeros y de los directivos del club.
¿Cómo le ha llegado la oportunidad de jugar en el Chaves?
Vinieron a ver a otro compañero del Ourense, pero me vieron a mí también, y parece que les gusté. Se pusieron en contacto con mi representante, vieron más vídeos y como la oferta era buena, allí me marché.
¿Tras ascender con el Ourense a Segunda División B, no le dio pena dejar el club?
Yo estaba dispuesto a renovar y negociamos. Yo estaba conforme con lo que estaba ganando, pero quería que me pagasen el alquiler del piso. No nos poníamos de acuerdo y entre medio surgió la posibilidad de venirme a Chaves, que además me ofrecía un contrato de dos años y hoy en día tener la seguridad de dos años es algo que no se puede desaprovechar.
¿Qué nivel ha encontrado?
El nivel es muy parecido a la Segunda B. La categoría se llama Segunda División, pero por encima hay dos más. En lo demás, el Chaves es un equipo histórico, que hace muy poco tiempo estaba en Primera División y lo que se quiere es regresar donde estaba antes. De aquí a Galicia hay tan solo 20 kilómetros, y me comentan que cuando estaba en Primera venían muchos seguidores gallegos.
¿A nivel de infraestructuras también se nota su pasado reciente en la máxima categoría?
Sí. Para entrenar hay unas instalaciones muy buenas y ahora al lado del estadio van hacer otro de hierba artificial, para castigar lo menos posible el césped. El estadio, además, es muy grande. Entran más de 20.000 personas.
¿Responden los aficionados?
Al estadio van unas 1.500 personas por partido y teniendo en cuenta la categoría en la que estamos no está mal. Lo que pasa es que al ser un estadio tan grande, queda un poco pobre. Eso sí, los que van no paran de animar y apoyan mucho al equipo. En la calle también se nota ese apoyo, ya que muchas veces nos paran a los futbolistas y nos muestran mucho cariño. Ahora mismo estamos terceros y pienso que si seguimos así y mantenemos las opciones de ascenso, irá más gente al estadio. Hay tres grupos y sube el campeón de cada uno.
¿A nivel personal cómo le van las cosas?
Muy bien. El año pasado acabé con problemas de pubis y al final me tuve que operar. Perdí algunos partidos a principio de temporada, pero una vez recuperado estoy jugando. El entrenador confía mucho en mí y es muy importante.
¿Qué objetivos se ha marcado en la liga portuguesa?
Ya que he tenido la oportunidad de venir, ahora lo que voy a intentar es abrir el mercado de Portugal. Vamos a tratar de ayudar al Chaves para subir un peldaño más y luego hacer méritos para que algún club que esté más arriba se pueda interesar.