El ministro francés de Finanzas, Pierre Moscovici, pidió al resto de países de la eurozona que se salten sus «líneas rojas» con el fin de lograr un acuerdo para desbloquear la ayuda urgente a Grecia. Lo hizo instantes antes de entrar en Bruselas en la reunión que ayer por la tarde debía decidir el desbloqueo y que, al cierre de esta edición, seguía sin hacer pública una decisión.

Sin embargo, las declaraciones del ministro francés sonaban a premonición de una liberación de la ayuda, dado el empeño que el Ejecutivo de François Hollande estaba poniendo en esta cuestión. «Tengo la sensación de que el acuerdo político está al alcance de la mano y es nuestra obligación como ministros de Finanzas hacer todo los posible para lograrlo esta noche», añadió Moscovici, quien puntualizó que Grecia «lo necesita y yo creo que la eurozona también».

Dudas alemanas

Por su parte, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, admitió que en los últimos días ha habido avances, pero se mostró más escéptico sobre las posibilidades de acuerdo. «No hemos hecho tantos progresos como para poder anunciar ya los resultados de esta reunión o de lo contrario no tendríamos esta reunión», manifestó.

Schäuble negó además un enfrentamiento entre el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Eurogrupo sobre qué medidas adoptar para reducir el peso de la deuda griega. «No tenemos ninguna disputa con el FMI. El FMI tiene sus propias condiciones sobre lo que es o no sostenible. Además, como el FMI es una organización bien considerada a nivel internacional, nosotros los europeos le hemos pedido que participe», explicó,