La Fiscalía de la Audiencia Nacional española pidió ayer que se aplace la entrega a Serbia de Vladimir Milisavljevic, presunto autor de la muerte del ex primer ministro Zoran Djindjic y condenado a 75 años de prisión en su país, y Sinisa Petric, otro de los llamados «tigres de Arkan», hasta que se resuelvan sus causas pendientes en el Estado español, donde están procesados por depósito de armas de guerra, pertenencia a organización criminal, falsificación documental y resistencia a la autoridad. Budapest les reclama por varios delitos relacionados con la organización criminal Clan Zemun.