Los trabajadores del 010 y de atención ciudadana de los centros cívicos de Gasteiz que se encuentran en huelga indefinida desde el pasado viernes por el mantenimiento de sus puestos de trabajo denunciaron ayer la vulneración de su derecho a huelga ya que el Ayuntamiento ha obligado a otros empleados de los centros cívicos a hacer labores que hacían los huelguistas como la recogida de escritos de los ciudadanos. En una comparecencia, los trabajadores informaron ayer de que el alcalde, Javier Maroto, ha anunciado que finalmente mantendrá doce de los cuarenta puestos de trabajo y que el resto de afectados irían a una bolsa de empleo para hacer sustituciones. La presidenta del comité, Ixone Iriarte, calificó este recorte de error, ya que se reducirá la calidad del servicio, y recordó que «a día de hoy el Ayuntamiento no hace sustituciones».