Victoria de Bilbao Basket sobre Manresa, que mantiene a los de Katsikaris en la segunda plaza de la ACB
Sobrados y con los secundarios a mil
Los hombres de negro se impusieron sin mayores problemas a un Manresa voluntarioso. A falta de que los primeros espadas jugaran a su mejor nivel, hombre como Hervelle y Grimau guiaron el triunfo local. Un parcial de 12-0 en el tercer cuarto decidió el encuentro.
BILBAO BASKET 83
MANRESA 63
Arnaitz GORRITI
Otra victoria más para el saco de Bilbao Basket. Sin excesiva brillantez, sobre todo de sus jugadores más destacados, que solamente ofrecieron pinceladas de su calidad, los hombres de negro sumaron la octava victoria de la competición doméstica, doblegando con suficiencia a un Manresa que peleó pero que nunca tuvo opciones reales de llevarse el triunfo de Miribilla.
Hay que reconocer que este Bilbao Basket está lanzado. El equipo demuestra mucha confianza en sí mismo y, aunque jugadores como Mumbrú, Raül López o Hamilton pueden no tener su mejor día, siempre saldrá alguien ofreciendo el nivel que el partido requiere. Ayer el principal protagonista no fue otro que Axel Hervelle.
El ala-pívot belga fue, sin duda, el sostén de los pupilos de Katsikaris en los dos lados de la cancha. En defensa y a la hora de cerrar el rebote ofreció las mismas dosis de siempre en cuanto a intensidad e implicación. Pero, además, estuvo muy acertado en ataque, con una mano más que interesante desde media distancia. Fue Hervelle, de hecho, mediante un difícil «dos más uno» tras rebote ofensivo, quien comandó el parcial de 12-0 en el tercer cuarto para poner punto final a la resistencia rival. El marcador pasaba del 60-50 al 72-50, y se acabó.
Por supuesto, no fue el belga el único que dio muestras sobradas de calidad. Sin ir más lejos, otro secundario de lujo como Roger Grimau ofreció detalles de verdadero nivel, como un reverso en las narices de Asselin.
Rakovic, Pilepic, y hasta Moerman -en el mejor partido del jugador galo en las filas bilbainas-, también dejaron detalles más que notables. Con los secundarios a mil, tampoco fue extraño que los habituales protagonistas de Bilbao Basket se dedicaran a surtirlos de balones y mostrar sus galones solo a veces -un alley oop de Hamilton, seguido de una canasta en fade away; esto es, lanzándose hacia atrás, así lo atestiguan-.
Cierta irregularidad
Con todo, el global del partido de los hombres de negro no fue maravilloso, ni mucho menos. el rival puso voluntad, y jugadores como Asselin y DeVries, acierto por momentos, pero eso no fue suficiente para inquietar a los de Katsikaris.
Quizá por eso se vio a los bilbainos ciertamente relajados pese a empezar con un 19-9 de inicio. Zisis cometió dos faltas rápidas y Raül López estuvo algo frío en un principio, mientras que Mumbrú, Hamilton y Vasileiadis se mostraban muy desacertados. Como los secundarios hacían bien su trabajo, el resultado era de un 43-35 favorable al final de la primera mitad.
Tres triples de Vasileiadis y el citado 12-o rompieron el partido. Ahora toca pensar en el duelo del miércoles ante Buducnost «El peor enemigo es la relajación», diría Katsikaris.