Escenario abierto en Italia: Berlusconi a todo gas, Monti dudando y Bersani compacta a la izquierda
Berlusconi está de vuelta. Su maquinaria electoral funciona ya a todo gas. Sus promesas: la Dolce Vita es posible en Italia otra vez, tal y como lo fue en los viejos tiempos; parar a Merkel; hacer todo para evitar que los «izquierdistas» gobiernen. Para ello dispone de multitud de cadenas de televisión y cientos de expertos que moldean la opinión pública a su favor. La irrupción de Berlusconi ha abierto diferentes escenarios de futuro.
Mientras Super Mario, el primer ministro tecnócrata Monti, sigue sin deshojar la margarita sobre su futuro, la jugada de Berlusconi, más que recuperar todo el poder, puede tener como objetivo blindar su impunidad ante la judicatura. Puede querer controlar las futuras reformas (Ley electoral, Ley de Medios...) de manera que éstas no cercenen el potencial de su imperio. Pero, en cualquier caso, no deberían menospreciar al veterano líder Pier Luigi Bersani, candidato del PD. Con él, la otrora poderosa izquierda italiana tiene dónde compactarse y organizar la pelea para recuperar el poder. Esta es la mayor amenaza, frente a la cual no parece aventurado descartar que Monti y Berlusconi pudieran hacer propósito común.