Hace unos días nos enteramos por la prensa de que Kutxabank ha procedido a hacer una ampliación de capital en Caja Sur por valor de 200 millones de euros, que se suman a los 150 millones de euros aportados en junio, necesarios para tapar el agujero de las preferentes en Caja Sur; un par de días mas tarde, nos enteramos de que 128 millones de euros más serán destinados a capital del «Banco Malo».

Los actuales dirigentes de Kutxabank, erre que erre. Se está jugando con fuego como en su momento se jugó con la frustrada compra de la CAM, que hubiera dejado a las cajas de la CAV en similar posición a lo que hoy queda de Caja de Navarra o con la realizada compra de Caja Sur que ha empeorado sensiblemente los ratios de solvencia... y se sigue incidiendo, con la misma temeridad, en la misma estrategia.

Quienes dirigen hoy las entidades Cajas-Kutxabank siguen obsesionados por participar de la manera que sea en la construcción de un gran banco español a costa de lo que sea. No vale decir que las cosas nos vienen impuestas por la Comisión Europea, cuando es voluntad de los actuales gestores de Cajas-Kutxabank privatizar y liquidar los activos de dichas cajas vascas para ponerlos a disposición de los especuladores, que es la única manera de avanzar en el proyecto de bancarización.

Ellos están apostando por esta estrategia y en vez de blindar el ámbito de actuación de la CAV siguen arriesgando el dinero de las personas ahorradoras y de las empresas vascas en operaciones especulativas lejos de nuestro territorio.

Y ni patronal ni el viejo ni el nuevo Gobierno dicen nada al respecto. Tanto unos como otros hablan de que las empresas vascas no tienen financiación, que se necesitan recursos financieros para el desarrollo de nuestro tejido productivo, pues bien hace unos días fueron 500 millones los que desaparecieron de aquí para ser utilizados para satisfacer los delirios de unos cuantos políticos del PNV y PP y dirigentes de Kutxabank. ¿A alguien de los que han tomado estas decisiones se le ha ocurrido pensar qué efecto tendrían esos 500 millones de euros invertidos en la creación de empleo de calidad en Euskal Herria?

Tenemos que parar esta insensatez. Los ahorros vascos no pueden dejarse en manos de cuatro especuladores por mucho que los actuales dirigentes de las Cajas-Kutxabank así lo hayan decidido; estas personas no pueden con sus decisiones insensatas privar a Euskal Herria de un instrumento fundamental para la reactivación de nuestro tejido productivo y la creación de empleo.

Entretanto, el partido del nuevo lehendakari, que ha pactado con el PP esta estrategia, nos habla de relanzamiento de la economía y no sé qué cosas más; nos está pretendiendo engañar; no se puede hablar honestamente de crear empleo y reactivar la economía vasca y vender a precio de saldo a los especuladores un instrumento financiero de control público como hasta ahora han sido las Cajas y Kutxabank; se está engañando a la gente.