«La lucha llevará a la readmisión de los despedidos en Cementos Lemona»
Cinco representantes de los trabajadores de Cementos Lemona insistieron en una entrevista con GARA que la huelga indefinida que protagonizan desde el 5 de diciembre continuará «hasta conseguir la readmisión de los 34 despedidos». Piden que se produzca la venta de la planta vizcaina a la irlandesa CRH, porque Cementos Portland Valderrivas «no quiere saber nada con ELA y LAB», según denunciaron.
Juanjo BASTERRA | BILBO
Jesús Oiarzabal, de ELA, es el presidente del comité de Cementos Lemona y Jabi Amorrortu es el responsable de LAB. Junto a ambos comparecen Celso Bizkarguenaga, Aitor Muñoz y Aitzol Oregi, miembros del comité. Anuncian que mañana a las 18.00 habrá una manifestación que partirá de la acampada de los trabajadores de Cementos Lemona, que llevan desde el pasado 5 de diciembre frente a la empresa para rechazar los despidos, pero que congregará también a trabajadores de las empresas de Arratia en crisis como Incoesa, Tecnichapa, Ormazabal, Tarabusi, Negarra, Gea-Ibérica, Araluce, Alfus, Hierros Sancho, TMC, Aliasa y Manufacturas Alfe, entre otras.
«La lucha y la negociación nos llevará a una salida digna, que pasa por la readmisión de los 34 despedidos en la planta de Lemoa, que Cementos Portland Valderrivas negoció en Madrid, junto a UGT y CCOO, dejando a un lado la representación que tenemos ELA y LAB», denuncia Jabi Amorrortu. Los trabajadores de la cementera vizcaina llevan en huelga indefinida desde el pasado 5 de diciembre. Fecha en la que comenzaron a llegar las primeras cartas de despido. En medio de este expediente de regulación que CCOO y UGT negociaron en Madrid a espaldas de los representantes de Cementos Lemona, se encuentra la venta de esa planta a la irlandesa CRH Plc (Cement-Roadstone Holdings).
Todos ellos afirman que la operación está finiquitada, pero todavía nadie da cuenta de ello, porque entre Cementos Portland Valderrivas, que pertenece al grupo FCC, y la irlandesa hay una pugna judicial tras la compra de la catalana Uniland, confirmó Aitor Muñoz. La irlandesa está dispuesta a abandonar la participación que mantiene en el grupo «a cambio de una planta cementera con acceso al mar», como explican los sindicalistas. Los representantes de ELA y LAB ven con buenos ojos la compra de Cementos Lemona por la irlandesa «porque, en realidad, es nuestro principal cliente. Es a la que le hemos vendido la producción estos últimos años, porque desde que hemos pasado a manos de Cementos Portland Valderrivas han desviado la cartera de clientes a la planta de Olazti y nosotros hemos producido para la irlandesa unos productos de alta calidad».
La llegada de la irlandesa supondrá, por otro lado, como explica Aitzol Oregi, que «se nos abra la posibilidad de negociar. Porque en la actualidad las condiciones laborales se deciden en Madrid entre CCOO y UGT y la dirección de la empresa». Porque la dirección de Portland Valderrivas «no quiere hablar con nosotros. Se han limitado a aplicar los despidos, y ya está».
ELA y LAB presentaron una demanda judicial ante la Audiencia Nacional contra el acuerdo logrado en Madrid, porque no tuvo en cuenta a la representatividad de los representantes de Cementos Lemona y los de la planta de Olazti. El próximo 21 de febrero se verá esa demanda colectiva en Madrid. Además, cada trabajador ha presentado «su demanda individual». «Hemos acudido al Preco dentro del CRL, pero nos dicen que intervendrán en materia de convenio, no por los despidos», dice Celso Bizkarguenaga en el encuentro.
Para mañana, el comité de ELA y LAB de Cementos Lemona ha convocado, junto a otros comités de la zona de Arratia, una jornada de protesta y movilización contra los despidos en esa comarca vizcaina. «A partir de las 18.00 hemos convocado a una manifestación que partirá de donde nos encontramos acampados desde el pasado 5 de diciembre para denunciar los despidos en Cementos Lemona», explica Jabi Amorrortu. Terminará la protesta ante el Ayuntamiento de Lemoa. «Queremos -señala Amorrortu- que se visualice que los trabajadores estamos dispuestos a la lucha para impedir que los despidos sigan creciendo y dejando a esta comarca empobrecida».
«Será una respuesta conjunta, porque no es admisible que seamos los trabajadores quienes paguemos la crisis económica que no hemos generado», explican los sindicalistas. En este caso, Aitor Muñoz indica que los 34 despidos en Cementos Lemona, «más otros dos que no se han ejecutado, con lo que el expediente de extinción sí que se puede modificar, al contrario de lo que nos dice la empresa», son parte de los 291 que han salido de todo el grupo en el Estado español. «Ha sido el único expediente que empezó en 250 afectados y ha terminado en 291. Es una manera de decir que han negociado CCOO y UGT, pero a peor, que es lo que no pasa en ningún expediente de estas características«», precisa el presidente del comité Jesús Oiarzabal.
Los sindicalistas recuerdan que en Arratia «se está deteriorando el clima laboral, por el continuo goteo de despidos en las empresas. Debe acabar». J. B.
