El grupo de Bildu en el Ayuntamiento de Iruñea propuso ayer en el pleno la creación de una comisión de investigación imparcial sobre la Policía Municipal. Esta petición está motivada en distintas informaciones publicadas por GARA en la que se detallan sanciones abusivas, acusaciones de mobbing, tasas de absentismo laboral disparadas, denuncias de prevaricación y hasta un intento de encarcelamiento a una agente de este cuerpo policial.

Bildu recuerda que el Pleno ya ha reprobado en dos ocasiones la labor del jefe de la Policía Municipal, Simón Santamaría, y afirma que «no va a cejar en su empeño por diseñar un nuevo modelo de Policía Municipal al servicio de los ciudadanos», así como reafirmar su voluntad en aclarar todos los escándalos.

A este respecto, Bildu culpa al alcalde de la ciudad, Enrique Maya, a la teniente de alcalde, Ana Elizalde, y al concejal del ramo, Ignacio Polo, de hacer oídos sordos a la mayoría representada en el pleno y sostiene que no podrán eludir una explicación de todo lo revelado.

Bildu también destacó que todos los miembros del cuerpo policial que están siendo «víctimas de acoso» tienen la solidaridad de la formación. Por contra, quienes no dispondrán nunca de esa solidaridad son «quienes se empeñan en convertir a la Policía Municipal en una policía al servicio de intereses partidistas, en este caso, de Unión del Pueblo Navarro».