Primera parte de la entrevista al corredor tejano
Armstrong: «Sí, me dopé»
«Mi cóctel consistía en EPO, transfusiones y testosterona», admite ahora el corredor estadounidense.
GARA | DONOSTIA
Lance Armstrong admitió haberse dopado durante toda su carrera profesional y haberse convertido en un auténtico «maestro» del consumo de sustancias prohibidas en la primera parte de su entrevista con la periodista Oprah Winfrey que se emitió en la noche del jueves. El tejano consideró esta práctica algo «normal» dentro del ciclismo y, sin implicar a ningún excompañero u otros ciclistas, reconoció que era «imposible» ganar el Tour sin consumir algún tipo de sustancia ilegal.
Armstrong explicó que su actitud de ganarlo todo la tomó cuando le dijeron que tenía cáncer y después lo traspasó a la competición. «Eso es malo, quise perpetuar la historia. La arrogancia y ser desafiante me perdieron. Ganar era importante y aún me gusta, pero ahora veo el triunfo de otra manera. Doparse era parte del trabajo, así es como yo lo veía», admitió.
A la hora de hablar de sustancias con las que se dopaba, reconoció que «mi cóctel consistía en EPO, transfusiones y testosterona». Además, agregó que «el sistema de pruebas no era tan complicado y había pocos exámenes fuera de competencia. En carrera estábamos limpios».
Por todo ello, el americano declaró que «el error es mío. Estoy sentado hoy aquí para reconocerlo y decir que lo siento».
Sobre las acusaciones de que obligó a sus compañeros de equipo a consumir productos ilegales para correr a su lado, respondió lo siguiente: «Rotundamente no. Sé que no soy la persona más creíble del mundo ahora mismo, pero no hice eso».
Además, Lance Armstrong quiso dejar claro que 2005 fue el último año que recurrió al dopaje, enfatizando que es falsa la acusación de utilizar sustancias prohibidas cuando regresó a la competición en 2009. Tras decir que se siente «mucho mejor, más feliz y más aliviado de haber dicho la verdad» acerca de su constante dopaje, añadió que quiere pedir perdón a las personas a las que ofendió gravemente, mencionando a Emma O'Rilley (masajista del US Postal) y Travis Tygart (jefe de la USADA).
El punto de inflexión para reconocer en público que se dopaba fue cuando Floyd Landis se decidió a declarar. «Pensé que la historia se sostendría por mucho tiempo, pero todo comenzó con la investigación federal». Cuando llamaron a declarar a George Hincapie, lo supo: «Mi destino estaba sellado. No culpo a George de todo. Es la voz más creíble en todo esto, conoce la historia mejor que nadie. Todavía somos grandes amigos».
Para finalizar la primera parte de la entrevista (la pasada madrugada se emitía la segunda), el americano se mostró dispuesto a colaborar con las autoridades: «Amo el ciclismo. Si hubiese una comisión para aclarar todo el asunto y ayudar al ciclismo seré el primero en ayudar».
Estas son algunas de las respuestas más destacadas de la entrevista que realizó la periodista estadounidense Oprah Winfrey a Armstrong.
Oprah Winfrey: ¿Alguna vez tomó sustancias prohibidas?
Lance Armstrong: Sí.
O.W.: ¿Era una de esas sustancias prohibidas EPO?
L.A.: Sí.
O.W.: ¿Alguna vez se hizo transfusiones de sangre, o hizo uso de sangre, para mejorar su rendimiento sobre la bicicleta?
L.A.: Sí.
O.W.: ¿Alguna vez utilizó cualquier otra sustancia prohibida como la testosterona, cortisona o la hormona de crecimiento humano?
L.A.: Sí.
O.W.: Durante sus siete victorias en el Tour de Francia, ¿alguna vez tomó sustancias prohibidas o se hizo transfusiones de sangre?
L.A.: Sí.
O.W.: ¿En su opinión, era humanamente posible ganar el Tour de Francia sin dopaje siete veces seguidas?
L.A.: No en mi opinión.
O.W.: Desde hace 13 años no ha parado de negar de forma descarada y desafiante que no se dopaba y ahora, en este momento, acaba de admitir todo lo contrario. Entonces, ¿por qué ahora lo admite?
L.A.: Esa es la mejor pregunta. Es la pregunta más lógica. No sé, no creo que tengo una gran respuesta. Voy a empezar mi respuesta diciendo que esto ha llegado demasiado tarde. También es demasiado tarde, probablemente, para la mayoría de la gente, y eso es culpa mía. Vi esta situación como una gran mentira que he repetido muchas veces y, como usted ha dicho, era como si hubiese aceptado el `no' y no quería salir de esa situación.
O.W.: Usted se mostraba desafiante. Llamó mentirosas a otras personas.
L.A.: Lo entiendo. Y aunque he vivido a través de este proceso, especialmente en los últimos dos años, un año, seis meses, dos, tres meses... yo sé la verdad. La verdad no tenía nada que ver con eso y con lo que dije ya, ahora todo se ha descubierto. Esta historia fue perfecta durante mucho tiempo. Y me refiero a la forma en que yo trato de ver la situación y la miro: supero la enfermedad, gano el Tour de Francia siete veces. Tengo un matrimonio feliz, hijos. Quiero decir que es solo la historia perfecta, mítica, y no era cierta.
O.W.: ¿Y eso no era cierto?
L.A.: Y eso no era cierto en muchos niveles.
O.W.: ¿Fue difícil estar a la altura de esa imagen que se ha creado?
L.A.: Imposible. Ciertamente, yo soy un personaje imperfecto, como bien sabes, y yo no podía hacer eso. Pero lo que vemos ahora y lo que hay ahora demuestra la otra realidad.
