La primera reunión pública de Iñigo Urkullu como lehendakari con otra autoridad institucional tuvo lugar ayer en el Palacio de la Zarzuela, donde le recibió el rey de España. Según relatan las agencias, además del carácter protocolario del encuentro, se abordaron temas políticos y económicos que afectan al ámbito estatal. La cita se desarrolló en un ambiente «cordial» y duró tres cuartos de hora.

En realidad, lo único que se conoce a ciencia cierta de la reunión es la conversación mantenida mientras ambos posaban ante los fotógrafos. Urkullu se interesó por la recuperación del monarca tras su última operación de la cadera, a lo que el Juan Carlos de Borbón, ayudado de muletas, respondió que todo marcha bien, preguntando a su vez por las fuertes lluvias caídas en territorio vasco.

El lehendakari se reunirá mañana con el diputado general de Araba, Javier de Andrés, y después con el de Gipuzkoa, Martin Garitano. Con el de Bizkaia, José Luis Bilbao, tiene cita el 28 de enero. Dos días después, Urkullu viajará a La Moncloa para mantener un encuentro con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy.

Como señaló en la entrevista publicada por este diario el pasado domingo, el lehendakari quiere reunirse entre el 8 de febrero y el 4 de marzo con los dirigentes de los partidos parlamentarios para hablar sobre los presupuestos de la CAV.

Recursos ante el TC

Por otra parte, el portavoz del Gobierno autonómico, Josu Erkoreka, declaró que Lakua defenderá «con uñas y dientes» las competencias que le corresponden, en especial «las relacionadas con servicios públicos esenciales», pese a que son conscientes de la tentación del PP de «usar la crisis como coartada para recentralizar y socavar competencias autonómicas».

En una entrevista concedida a Onda Vasca, Erkoreka señaló que esa defensa de las competencias estatutarias «pasa por hacerlas valer en los foros bilaterales o multilaterales en que tengamos presencia, así como en la búsqueda de la singularidad vasca en la legislación estatal y haciendo valer todos los mecanismos judiciales».

En cualquier caso, el Ejecutivo autonómico es consciente de que «el Gobierno [español], que de tiempo atrás tenía ganas de meter mano a la estructura del sistema autonómico, se sirve de la crisis para alimentar esa estrategia y eso lo vemos en muchos ámbitos y sectores».

Erkoreka defendió que, frente las invasiones competenciales, Lakua recurra al Tribunal Constitucional español porque «la alternativa sería lanzarse a la desobediencia civil sistemática, algo que un gobierno, que está para cumplir y hacer cumplir las leyes, no puede hacer de entrada, al menos no de modo sistemático, sin perjuicio de que pueda formular protestas políticas». Recordó que también la izquierda abertzale recurre al TC «cuando tienen en juego derechos que quieren hacer valer».