LAB se muestra partidaria de crear un frente sindical contra la reforma laboral
El sindicato LAB considera un «grave ataque» a los derechos de los trabajadores el acuerdo alcanzado el pasado 11 de enero en relación a la nueva reforma laboral francesa. De cara al debate parlamentario que tendrá lugar en abril, la central llamó a crear un frente sindical.
Ainize BUTRON | BAIONA
Tras el acuerdo alcanzado el 11 de enero entre el Gobierno francés, las organizaciones patronales y tres de las cinco federaciones sindicales de trabajadores, que justificaron «para una mejor seguridad del empleo», el sindicato LAB valoró ayer las grandes líneas del documento y criticó su contenido.
Los dirigentes del sindicato Geronimo Prieto y Eñaut Aramendi explicaron que el texto tiene como propósito romper el actual código del trabajo francés. «En la arquitectura, si quitas uno de los pilares, todo se derrumba. Y en este caso ¿qué es lo que se va a caer? el código del trabajo. Quieren romper el derecho del trabajo para mejorar la competitividad de las empresas», explicó Prieto.
Señalaron que «hablar, como hace el Ejecutivo, de flexibilidad y de seguridad del empleo a la vez, es un sin sentido». Ante este «ataque» a los derechos de los trabajadores, el sindicato abertzale ve imprescindible crear un frente común sindical y se mostró dispuesto a imulsarlo en las próximas semanas.
Prieto insistió en que la política de flexibilidad «la padecemos hoy en día muchos trabajadores». «El concepto de flexi- bilidad esta desarrollándose, y con ello los pilares del trabajo se están derrumbando, lo que destruye todas las normas colectivas de trabajo», insistió.
El Acuerdo Interprofesional será presentado en el consejo de ministros a principios del mes de marzo y la Asamblea Nacional francesa examinará el documento en abril «en procedimiento de urgencia».
En relación a este acuerdo, el sindicato hizo referencia a un nuevo aspecto negativo en la negociación. Si bien estos últimos años los sindicatos mayoritarios franceses, que son la CGT y la CFDT, habían conseguido llevar adelante luchas comunes, el actual Gobierno de Hollande ha roto el frente sindical. «Esto despierta preocupaciones entre los trabajadores», indicó. Sin embargo, para LAB la «patronal no ha conseguido todavía una victoria». Como se prevé que la ley llegue al Parlamento en mayo, el sindicato anunció que durante estos meses «invertirá el tiempo en explicar, combatir para superar el acuerdo».
Según la central existe una alternativa: «Reconstruir el derecho del trabajo para garantizar el empleo, los salarios, el estado de derecho en las empresas, la salud, la higiene, la seguridad social, los derechos sindicales y los de las instituciones representativas del personal».
Orientación del Gobierno
Por su parte, Aramendi criticó la orientación tomada por el actual Ejecutivo francés que situó en la linea del precedente Nicolas Sarkozy.
Según LAB, «la adopción del tratado europeo sobre la estabilidad, las políticas que impone la austeridad como únicas posibles y el Pacto de competitividad son una buena muestra de la orientación tomada por el Gobierno».
De los veintiocho artículos que conlleva el Acuerdo Interprofesional Nacional alcanzado el 11 de enero, los miembros del sindicato LAB subrayaron algunos que, según Geronimo Prieto y Eñaut Aramendi, «son suficientes para hacerse una opinión negativa de este acuerdo basura». En el punto que concierne a los acuerdos sobre «mantenimiento del empleo» o de «la competitividad», se permitirá a las empresas llegar a un acuerdo con sindicatos mayoritarios para bajar los salarios o aumentar la duración del tiempo de trabajo a cambio de garantizar el puesto de trabajo. Y si la empresa se siente en dificultad económica, un acuerdo de empresa podrá obligar al asalariado a renunciar a su contrato de trabajo.
Además de ello, desde LAB denunciaron el apartado referente a la creación del contrato duradero «intermitente». Esta fórmula, presentada como experimental y creada para las empresas de menos de 50 asalariados -empresas mayoritarias en Ipar Euskal Herria-, prevé la posibilidad de alternar periodos de trabajo y de paro. Otro de los puntos negativos, según la central, es el relativo a la posibilidad de «organizar el trabajo sin un plan social e imponiendo la movilidadal trabajador». A.B.
LAB advirtió de que el acuerdo es «un peligroso retroceso social, que refuerza los poderes de la patronal y que resta todavía más derechos de los pocos que tienen los trabajadores con o sin empleo».