El dictador Ríos Montt irá a juicio por el genocidio de poblaciones indígenas
En una histórica resolución, un Juzgado de Guatemala ha determinado que existen «fundamenos serios» para juzgar al dictador Efraín Ríos Montt por el genocidio de 1.170 indígenas mayas ixiles. Se trata del primer ex gobernante en ser procesado por este delito.
GARA | CIUDAD DE GUATEMALA
El dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt, de 86 años, deberá sentarse en el banquillo de los acusados por el genocidio de poblaciones indígenas durante su régimen (1982-1983). Se trata de una resolución histórica al ser el primer ex gobernante en ser procesado por este delito en Guatemala. Una decisión que se produce, además, bajo el Gobierno del exgeneral Otto Pérez, a quien organismos no gubernamentales acusan de haber cometido violaciones de derechos humanos contra los mayas.
Familiares de víctimas, activistas humanitarios y militares retirados que apoyan al dictador abarrotaron la pequeña sala del Juzgado Primero B de Mayor Riesgo de Ciudad de Guatemala en la que el juez Miguel Gálvez dio a conocer su decisión, citando a las partes para una nueva audiencia mañana en la que, tras la aportación de pruebas, definirá la composición del tribunal que llevará el juicio en una fecha sin determinar.
Según el magistrado, «existen fundamentos serios para someter a Ríos Montt a juicio oral y público por la supuesta probabilidad de su participación en los delitos que se le imputan». El dictador guatemalteco, presente en la sala, no se inmutó al escuchar la decisión.
Solo se oyó un murmullo, mientras que familiares de las víctimas quemaron petardos en la parte baja del edificio de la Corte Suprema de Justicia, donde está ubicado el Juzgado.
Bajo el régimen del general Ríos Montt, que llegó al poder tras encabezar un golpe de Estado en 1982, el Ejército aplicó la llamada política de «tierra arrasada» sobre poblaciones indígenas, a las que acusaba de colaborar con la guerrilla.
En este proceso concreto está acusado de la matanza de unos 1.770 indígenas mayas ixiles en el departamento de Quiché, al norte del país.
Sus abogados alegaron que nunca se enteró de las masacres cometidas por el Ejército, pese a ser la máxima autoridad del país y ostentar el grado de general. «Quieren colgar a Ríos Montt por algo que no hizo», sostuvo el abogado y ex guerrillero Danilo Rodríguez.
Se calcula que el accionar fundamentalmente de las Fuerzas Armadas guatemaltecas y de los escuadrones de la muerte dejaron entre 1960 y 1996 200.000 muertos y desaparecidos.
Durante más de catorce años José Efraín Ríos Montt se hizo elegir de forma consecutiva diputado al Congreso para evadir a la Justicia de Guatemala, que le merodeaba para que respondiera por la sangrienta represión militar que desató durante los 17 meses que gobernó y en los que, según diversas fuentes, el Ejército perpetró más de 250 matanzas colectivas de indígenas, sobre todo en las zonas del oeste y noroeste del país, en las que murieron más de 25.000 personas..
Desde 1974, cuando se presentó como candidato presidencial del desaparecido partido Democracia Cristiana, hasta la fecha, este militar retirado de 86 años ha sido uno de los más destacados protagonistas de la vida política de Guatemala. Resaltó como militar de línea dura, pastor de una congregación evangélica fundamentalista, mesiánico líder político de derechas, eterno aspirante a la Presidencia e icono de la represión.
Una de sus primeras medidas fue poner en marcha los Tribunales de Fuero Especial, en los que jueces con el rostro cubierto condenaron a muerte a 16 personas, y obligar a los indígenas enrolarse en la Patrullas de Autodefensa Civil, grupos paramilitares. Carlos ARRAZOLA
«Empieza a verse luz al final del túnel de la impunidad que ha dominado a Guatemala a lo largo de décadas», consideró la activista de derechos humanos y directora de la asociación Seguridad en Democracia, Iduvina Hernández.
