Parec�an chorizos y han resultado ser cerdos. Embutidos en sus trajes de mil euros, adornados con sus corbatas de porque puedo y siempre acompa�ados de su dios, ese que es tan bueno; como digo, parec�an chorizos y resultaron ser puercos. Cutos, para que ellos lo entiendan tambi�n. Navarra no s� si tiene cadenas, pero si algo tiene es due�o. En Sicilia se llamar�a Cosa Nostra, en N�poles Camorra, en Rusia Babushka y aqu�, aqu� simplemente se llama UPN. Due�os y Se�ora de lo que fue un gran Reyno y ellos lo han convertido en porquera. La cabra tira al monte y el cerdo se lo monta a su manera; com�moslo todo que algo siempre queda. Hasta que ya no queda. Es entonces cuando el ciudadano de a pies puntillas decide que es suficiente, que por muy alma de c�ntaro, �l quiere vino y no agua de la fuente. Y fuenteovejuna, una m�s una m�s alguna otra, se arrejunta la plebe y dice, se�ores, no se pasen de la raya que por mucha riqueza que aqu� haya, raya a raya, donde hab�a un oc�ano no va a quedar ni playa.

Me sorprende cero, la verdad. Fueran antes terratenientes o alumnos de la UN con notas de sobresaliente, �alguien cree que trabajar�an por amor al arte y el bien de la gente? Nadie es tan inocente. Y todos somos, en parte, culpables. Ahora se destapa el derroche en la CAN, el robo a mano jartada y el despilfarro por la cara. A agua pasada todos son lodos. Entre esp�rragos bien gordos y melones cojonudos, repart�an pesetas mientras se quedaban con los duros. Cutos no, recutos. Y nosotros, bobos no, rebobos. Entretenidos como nos ten�an compr�ndonos nuestras casicas, subvenciones de todo tipo, tan fortachones los y tan monicas las, a joderse toca, nos han dejado a dos velas. Y m�s vale que no nos tengamos que pasar una semana ingresados en el hospital, que dicen, llegas mal y sales difunto de la comida que all� dan.

Ser� por motivo parejo que los directivos de nuestra sacrosanta caja de ahorros invitaban a empresarios de su misma piara a comer en Par�s, no fueran a comer aqu� y les sentara cual patada en la huevada. No saben nada. Veinte helic�pteros para ciento cincuenta chup�pteros, bien vestidos todos ellos, traje, corbata y cara de cerdo. De cuto, perd�n.

No manda capit�n donde se habla con dinero y poderoso caballero acab� en quiero y no puedo. Las arcas p�blicas saqueadas, la educaci�n y la sanidad pisoteadas, miles y miles de casas que conforman ciudades fantasma, ni pan para hoy ni nada de nada. Y mientras unos tanto y otros tan tontos, ellos contin�an luciendo papada, ah�, que se note, que se note que son la cr�me de la cr�me, lo muy muy y lo m�s m�s de lo que alg�n d�a fue el lugar donde todo sobraba.

Quien regala dinero, sea en forma de subvenciones o sea como sea, solo busca que nadie mire para que nada se vea. Y de ese dinero regalado, muchos de los ahora indignados, tambi�n chuparon, y bien que chuparon, mientras p�blicamente culpaban a la ETA de todos los desaguisados. Hasta mis seis txapelas se pagaron con el dinero aquel que con nuestro silencio deb�amos agradecer. Pues ni lo hice ni lo har�. Por lo que donde digo CAN digo Kutxa tambi�n. Otro a�o que no gano.