Bera Bera afronta hoy la ida de los octavos de final de la Recopa, una competición revalorizada desde que acoge a los clubes que quedan eliminados de la Champions League, y lo hará en la pista del Vistal Laczpol Gdynia polaco (17.00, Kleven y Ramberg -Noruega-), el rival que le sorprendió hace cuatro meses en la fase previa de la Champions disputada en Viborg (Dinamarca), donde le venció por un contundente 22-31 (11-18 al descanso).

Reyes Karrere recordaba el jueves que en aquel partido sufrieron una especie de shock, «jugamos muy mal, no estábamos preparadas», a lo que se añadió la falta de datos sobre el Laczpol -«creíamos que tenía otro perfil de equipo»-. Lo cierto es que en la primera parte un Bera Bera lejano del nivel de conjunción del actual, adaptándose a la llegada de cinco nuevas incorporaciones, cometió demasiados errores en su juego ofensivo, que fueron penalizados por el contraataque polaco.

Al descanso el partido estaba casi decidido y Bera Bera había encajado demasiados goles, 18. Baste señalar que de los 19 partidos oficiales ya disputados esta temporada, las otras dos veces en que más goles ha encajado al descanso han sido 13, en Elche y en Bidebieta ante Zuazo.

Las circunstancias son diferentes ahora. La clasificación se juega a doble partido (la vuelta será el próximo domingo en el Josean Gasca, a las 12.30), Bera Bera está mucho más rodado y, sobre todo, sabe mucho mejor a qué se enfrenta. Karrere reconoce que la eliminatoria está complicada por el nivel del Laczpol, pero también que esta vez tienen más opciones. Las competiciones europeas siempre han proporcionado un plus de motivación al club donostiarra, porque le permiten medirse a rivales diferentes a los de la Liga y se resuelven en dos partidos, y esta vez no será una excepción.

Lo que quiere Karrere es que su equipo sea agresivo y que el encuentro sea duro, porque en esas condiciones confía en que aumentarán sus opciones de seguir adelante. No hay que olvidar que hay dos partidos, y lo que Bera Bera buscará esta tarde es un resultado que le permita afrontar la vuelta con posibilidades. Lo mejor es una victoria, pero una derrota en un margen no superior a los 4-5 goles permitiría acudir con opciones al partido de vuelta en Donostia.

Quizá las mayores dificultades de la cita de hoy se centren en la propia plantilla de Bera Bera. Las molestias que sufre Eli Pinedo en su gemelo derecho (solo ha jugado un partido en todo enero, en Canarias), de las que se resintió el miércoles, y el esguince de tobillo de Dunay, que le impidió acabar el partido ante el Porriño, hacen que su alineación se mantenga en el aire. La amurriotarra se mostraba optimista y no dudaba de que podría jugar pero, si Karrere no lo ve completamente claro, podría optar por no correr riesgos.

El Laczpol es el tercer clasificado de la Liga polaca, y sus dos últimos partidos han sido ante los dos equipos que le preceden.

En la cancha del segundo, el Zaglebie Lubin, perdió por 31-20, y el miércoles superó en casa al líder, el SPR Lubin, por 35-30. Al igual que Bera Bera, marca muchos goles (30 por partido, 31 las donostiarras), pero también encaja muchos (27, 22 Bera Bera).

Desde setiembre ha recuperado a una jugadora importante, la lateral Duran -entonces lesionada de menisco-, y ha cambiado de entrenador, con la llegada del danés Jens Steffensen. Su mejor jugadora y goleadora es la pivote Kulwinska -que hizo muchísimo daño a Bera Bera en el partido de Viborg-; cuenta con seis jugadoras muy solventes en su primera línea (Mateescu, Duran, Zych, Andreejewska y dos ex de Bera Bera, Petrinja y Krnic); y dos extremos muy peligrosas al contraataque, sobre todo la diestra Sulzycka, y la zurda Koniuszaniec.