Tras un comienzo de semana de infarto, cuando el Ibex llegaba a perder un 3,77%, se pasó ayer a un viernes de calma en el que pudo recuperar el pulso. Así las cosas, dejó atrás el tiempo de intensa zozobra y se apuntó un 2%, hasta los 8.174,90 puntos. Es decir, solo un 0,69% por debajo del cierre semanal anterior. En el resto de las plazas europeas también se decantaron por las subidas. París recuperó un 1,35%, Fráncfort, un 0,71%, y Londres, un 0,57%. Las razones para esta reacción alcista se encontraban a ambos lados del Atlántico. En Europa sorprendió el rápido cierre del acuerdo sobre el techo del gasto comunitario para el periodo 2014-2020, mientras que en Estados Unidos se entusiasmaban con la reducción del déficit comercial a su nivel más bajo en dos años. En diciembre cayó un 21%, hasta 38.500 millones de dólares, con un comportamiento inusitado de las exportaciones petroleras y una mejoría en sus intercambios con China. Dentro del Ibex, IAG (+4,53%), pese los serios problemas laborales que arrastra desde hace meses, marcó el paso a los ganadores. No muy lejos terminaron BBVA (+4,45%), Popular (+4,27%), Santander (+3,54%) y Bankinter (+3,32%). Los bancos parecían celebrar la devolución adelantada de una parte de las ayudas de emergencia al BCE. De los cinco valores que cedieron terreno, el peor fue Indra (-2,80%). En París, Crédit Agricole (+6,92%) lideró destacado los avances en una buena sesión para las entidades financieras. Société Générale y BNP Paribas, por su parte, sumaban más de un 2%. Renault (-1,18%) fue el más castigado entre los ocho perdedores.