Partido vital en el Sadar
Cómodo en el cuerpo a cuerpo
Los rojillos pretenden dar continuidad el sábado ante el Zaragoza a su buena racha contra rivales directos.
Jon ORMAZABAL
A pesar de que, nada más conseguir abandonar los puestos de descenso, José Luis Mendilibar mostrara su preocupación temiendo que su equipo pudiera relajarse, parece evidente que a Osasuna le van los duelos con rivales directos y ahí está cimentando buena parte de su recuperación anímica y clasificatoria. Así, los triunfos conseguidos ante Deportivo y Celta, sumados al empate obtenido en Mallorca, han dado cierto aire a los rojillos, que este sábado podrían dar un gran paso adelante en caso de conseguir imponerse a otro equipo, el Zaragoza, inmerso en la lucha por huir de la quema.
«Venimos de una primera vuelta en la que nos faltan puntos y ahora jugamos ante rivales que son equipos ante los que, si Osasuna se merece estar en Primera, tenemos que ganar. Aquí está la permanencia», declaró ayer el portero Andrés Fernández en Tajonar.
No haber recuperado el golaverage -lo tiene en contra con los dos equipos gallegos y empatado con el Mallorca- podría ser el único pero que se le puede poner a esta racha de partidos que no quisieron ser calificados como finales pero que tuvieron bastante de ello. De hecho, hasta el punto que se consiguió el sábado en Son Moix está empezando a perder el amargo gusto que dejó entre los rojillos por el momento y la forma en la que se recibió el gol. «El punto está bien tal y como fue la jornada. Sumamos en un campo de un equipo que está abajo y que incluso hizo méritos para ganar. Ahora, el sábado, viene el Zaragoza y tenemos que ir a por ellos. Tenemos que ganar el partido porque eso es lo importante para nosotros», explicó el portero murciano.
En ese sentido, siendo consciente de la importancia del próximo compromiso, apostó por olvidar cuanto antes lo sucedido en Mallorca. «Después del partido sientes mucha rabia por el minuto que es, por cómo se da la jugada... Por todo. El domingo analicé la jugada y ahora hay que aprender de lo que se puede mejorar. El lunes ya se tiene que empezar a mirar hacia delante y valorar las cosas porque el punto que se consiguió es importante. El equipo trabajó bien y la liga continúa. Estamos todos para ayudarnos y corregir errores», explicó el rojillo, quien asumió su parte de culpa en el gol del equipo bermellón. «Mi decisión es tardía y tenía que haber decidido salir con más fuerza o quizás haberme quedado en la portería», agregó.
Además de ser un partido ante un rival directo, el duelo ante el Zaragoza tiene una carga emotiva para la afición rojilla, pero Andrés Fernández entiende que la plantilla debe tratar de aislarse de todo ese ambiente que se crea. «Yo lo tomo como un partido más. En los partidos de casa, sea el rival que sea, tenemos que ir a por ellos y no importa la rivalidad que haya o que no haya. Los tres puntos se tienen que quedar en casa».
Fuertes en el Sadar
El fortín del Sadar está siendo otra de las claves de la mejoría de Osasuna estas últimas semanas, donde lleva dos victorias consecutivas en este 2013. Además, el estadio iruindarra es uno de esos que históricamente se le atraganta al Zaragoza, que solo ha conseguido 2 victorias en las últimas 20 visitas. La última vez que Osasuna perdió en casa contra el Zaragoza fue en la temporada 2003-2004, gracias a un tanto de David Villa de penalti. Si buscamos otra victoria maña en Iruñea, hay que retrotraerse a la temporada 1984-85, en la que Ivica Surjak marcó el único gol.
Al contrario que la de Osasuna, la dinámica del Zaragoza es descendente, ya que suma ya siete partidos consecutivos sin ganar. La última victoria del equipo se produjo el 9 de enero frente al Levante en Copa en la Romareda, y en Liga tan solo ha sumado dos de los últimos 18 puntos en juego.
A esto hay que sumarle que, de cara al partido de Iruñea, Manolo Jiménez contará con dos bajas muy importantes, el ariete Postiga y el defensa Álvaro González, al margen de la del joven lateral Héctor. La ausencia del delantero portugués se antoja especialmente significativa, ya que el atacante ha marcado en seis de las siete victorias que el Zaragoza ha cosechado en la presente temporada, así como en los dos empates con goles del equipo maño. El luso ha sido titular en 22 de los 23 partidos de Liga y reserva en el Camp Nou, donde jugó 17 minutos por decisión técnica. La presencia en Iruñea del central Gleen Loovens, con una rotura fibrilar, es bastante dudosa.
Andrés Fernández analizó la jugada del gol encajado en Mallorca, en el que, a su entender, no reaccionó bien. «Mi decisión es tardía y tenía que haber decidido salir con más fuerza o quizás haberme quedado en la portería», explicó.
La LFP comunicó ayer que el derbi a disputar entre Osasuna y Athletic, correspondiente a la vigésima sexta jornada de la Liga, se disputará el sábado 2 de marzo a partir de las 20 horas. Tras jugar este sábado ante el Zaragoza, los rojillos se medirán al Levante el lunes 25.
A pesar de que desde Zaragoza Romaric lo comparó con un Betis-Sevilla, el portero rojillo afronta el partido del sábado como «uno más. En los partidos de casa, sea el rival el que sea, tenemos que ir a por ellos», apuntó.
El mecanismo de solidaridad de la FIFA está siendo una buena fuente de ingresos para el equipo rojillo, que recibirá en torno a 659.000 euros en concepto de derechos de formación por la venta de Nacho Monreal del Málaga al Arsenal. También pelea por 800.000 por Javi Martínez.
A pesar de que todavía no cuenta con el alta médica, Timor volvió a ejercitarse con el resto de compañeros en la sesión diseñada por Mendilibar en Tajonar. Aunque no había demasiada nieve, el de Zaldibar ordenó realizar el entrenamiento en un campo de hierba artificial.