RONDA DEL LEHENDAKARI CON LOS PARTIDOS
Urkullu no concreta sus recortes a la oposición ni cierra ninguna alianza
El lehendakari, Iñigo Urkullu, cerró ayer con PSE y EH Bildu la ronda con los partidos de la oposición sin exponer las líneas generales de sus presupuestos y sin concretar sus recortes. López y Mintegi dejaron claro que será difícil cualquier acuerdo si se toca el gasto social.
Iñaki IRIONDO | GASTEIZ
La ronda de reuniones del lehendakari con los partidos con representación parlamentaria se cerrará hoy con el encuentro con su amigo y presidente del EBB, Andoni Ortuzar. Será la única cita que se salde con un balance positivo. El resto de dirigentes que han pasado por Lehendakaritza han dejado claro, con diferentes niveles de contundencia, sus temores sobre los recortes que pueden darse en los presupuestos, unos recortes que Iñigo Urkullu no ha querido concretar y que remite a la presentación del proyecto.
Al lehendakari le queda, por tanto, la tarea de tratar de buscar acuerdos y establecer alianzas que le permitan aprobar los presupuestos de este ejercicio, y en ninguno de los partidos de la oposición se observa ningún entusiasmo por ello, aunque el PP parece el más proclive.
En este sentido, Patxi López anunció que le había pedido al lehendakari la creación de grupos de trabajo para hablar no solo del presupuesto, sino también de los contenidos referidos a los apartados de paz y normalización, y al de autogobierno y revisión institucional interna. Iñigo Urkullu le respondió afirmativamente, aunque las concreciones quedarán para más adelante.
López: «No hay 1.200 millones»
Las citas arrancaron con el recién reelegido secretario general del PSE. Se trataba del primer encuentro público desde que Patxi López quedara en tercer lugar en las elecciones y acabara reemplazado por Iñigo Urkullu en Ajuria Enea, y se desarrolló en un ambiente que el invitado calificó de «cordial y franco».
López entró en la reunión con sus «líneas rojas» claramente marcadas en los discursos del Congreso de su partido de este fin de semana. Y habiendo dejado claro que los problemas de ingresos que tiene el actual Ejecutivo son culpa del PNV, porque desde la oposición y las diputaciones que manejó evitó hacer los cambios necesarios en política fiscal.
Patxi López señaló que no habían podido concretar nada en el ámbito presupuestario, puesto que el Gobierno no tiene proyecto todavía, y los comentarios sobre la materia habían sido muy vagos. En todo caso, quiso dejar claro que los 1.200 millones menos que hay para las cuentas de este 2013 no se pueden sacar de las inversiones porque no dan para tanto.
El PSE se muestra dispuesto al diálogo y el Gobierno necesita apoyos, pero en su fuero interno López cree que el PNV acabará buscando un acuerdo con PP y UPyD. Asegura que el PSE no va a apoyar unos presupuestos por el mero hecho de que los haya, puesto que considera que sería una actitud «irresponsable» dar vía libre a determinados recortes.
Criticó la inacción del Gobierno en un momento que se ha definido como de «emergencia nacional». Aseguró que «Euskadi necesita precisiones» y este Ejecutivo todavía no las tiene.
Tras la cita con Patxi López, llegó la hora de Laura Mintegi. Estos dos encuentros, y el que tuvo la pasada semana con Antonio Basagoiti, han durado en torno a hora y media.
Mintegi: «Muy preocupada»
La portavoz de EH Bildu mostró a la salida su «gran preocupación», porque no había escuchado en persona al lehendakari nada que no hubiera oído antes, ni vio «voluntad de hacer frente a los ataques que vienen desde Madrid». Es más, teme que sea «correa de transmisión» de lo que allí se decide.
Según afirmó el portavoz del Gobierno, Josu Erkoreka, hay un hecho claro: 1.200 millones de euros menos. Y tras las dos citas de ayer, aseguró que todos los partidos que han pasado por Lehendakaritza y el propio lehendakari están de acuerdo en proteger las partidas de Sanidad, Educación y Protección Social. Sin embargo, Mintegi aclaró que Iñigo Urkullu había dicho que las tocarán «lo menos posible», de lo que concluye que «las tocarán». La portavoz de EH Bildu le planteó que hay que responder como país y que el lehendakari podría contar con apoyo social para, en lugar de trasladar los problemas económicos a la población, «llevárselos a quién los ha originado, que es Madrid».
Mintegi y Urkullu también hablaron de paz y normalización. EH Bildu mostró el carácter histórico del momento que vinimos, y pidió al lehendakari que su partido, junto con todos los agentes políticos, se implique en la búsqueda de soluciones, «no solo en el Parlamento, sino también en otros foros».